¿Cómo sé si mi hijo tiene amigdalitis?
Lunes 05 de
Febrero 2018
¿Tiene dificultad para tragar y se niega a comer? Una de las posibilidades es que padezca esta inflamación
No todos los dolores de garganta resultan ser amigdalitis, pero las infecciones de garganta son muy comunes en los niños y muchos desarrollan amigdalitis durante la infancia.
La amigdalitis es la inflamación de las amígdalas, que son los nódulos linfáticos en forma de almendra que se encuentran a ambos lados en el fondo de la garganta. Las amígdalas actúan como filtros para los gérmenes que llegan a la garganta, pero si se infectan, se pueden inflamar.
Además de tener dificultad para respirar y negarse a comer, otros síntomas de que tu hijo podría tener amigdalitis incluyen:
- Un dolor de garganta persistente.
- Dolor de oído.
- Ronca o respira por la nariz mientras duerme.
- Fiebre o escalofríos.
- Glándulas hinchadas en el cuello o la mandíbula.
- Pérdida de la voz.
- Dolor de cabeza.
- Babeo
- Puntos blancos en las amígdalas.
Sin embargo, hay muchos otros tipos de infecciones de la garganta que pueden tener síntomas similares, por eso el médico tendrá que examinar a tu hijo para hacer el diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica?
Primero, el médico examinará el interior de la boca de tu niño con una pequeña linterna para verificar si las amígdalas están rojas o inflamadas. También buscará puntos blancos o pus en las amígdalas.
Después seguramente palpará debajo de la mandíbula de tu hijo y alrededor de su cuello para ver si tiene los nódulos linfáticos hinchados. Así como las amígdalas, las glándulas linfáticas forman parte del sistema de defensas del organismo y se pueden inflamar cuando el cuerpo está combatiendo una infección.
Dependiendo de los síntomas de tu hijo y de lo que vea el doctor, es posible que decida obtener una muestra de las células de la garganta de tu hijo. Esto le ayudará al médico a determinar si la amigdalitis es viral o bacteriana. El médico usará un hisopo grande de algodón y lo pasará en el interior de la garganta de tu niño, pero esto no le hará daño a tu hijo. El médico enviará entonces el hisopo al laboratorio de análisis y los resultados estarán listos en 2 a 4 días.
La mayoría de los casos de amigdalitis son virales, lo cual significa que tu hijo probablemente no necesitará antibióticos. Y aunque los resultados muestren que tu hijo tiene una infección bacteriana, es posible que el médico no le recete antibióticos a tu niño. Esto se debe a que los antibióticos no siempre aceleran la recuperación y podrían tener efectos secundarios desagradables.
La amigdalitis es la inflamación de las amígdalas, que son los nódulos linfáticos en forma de almendra que se encuentran a ambos lados en el fondo de la garganta. Las amígdalas actúan como filtros para los gérmenes que llegan a la garganta, pero si se infectan, se pueden inflamar.
Además de tener dificultad para respirar y negarse a comer, otros síntomas de que tu hijo podría tener amigdalitis incluyen:
- Un dolor de garganta persistente.
- Dolor de oído.
- Ronca o respira por la nariz mientras duerme.
- Fiebre o escalofríos.
- Glándulas hinchadas en el cuello o la mandíbula.
- Pérdida de la voz.
- Dolor de cabeza.
- Babeo
- Puntos blancos en las amígdalas.
Sin embargo, hay muchos otros tipos de infecciones de la garganta que pueden tener síntomas similares, por eso el médico tendrá que examinar a tu hijo para hacer el diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica?
Primero, el médico examinará el interior de la boca de tu niño con una pequeña linterna para verificar si las amígdalas están rojas o inflamadas. También buscará puntos blancos o pus en las amígdalas.
Después seguramente palpará debajo de la mandíbula de tu hijo y alrededor de su cuello para ver si tiene los nódulos linfáticos hinchados. Así como las amígdalas, las glándulas linfáticas forman parte del sistema de defensas del organismo y se pueden inflamar cuando el cuerpo está combatiendo una infección.
Dependiendo de los síntomas de tu hijo y de lo que vea el doctor, es posible que decida obtener una muestra de las células de la garganta de tu hijo. Esto le ayudará al médico a determinar si la amigdalitis es viral o bacteriana. El médico usará un hisopo grande de algodón y lo pasará en el interior de la garganta de tu niño, pero esto no le hará daño a tu hijo. El médico enviará entonces el hisopo al laboratorio de análisis y los resultados estarán listos en 2 a 4 días.
La mayoría de los casos de amigdalitis son virales, lo cual significa que tu hijo probablemente no necesitará antibióticos. Y aunque los resultados muestren que tu hijo tiene una infección bacteriana, es posible que el médico no le recete antibióticos a tu niño. Esto se debe a que los antibióticos no siempre aceleran la recuperación y podrían tener efectos secundarios desagradables.
Con información de
rosario3