La tecnología al servicio de la salud: desarrollan apps que podrían "curar"
Martes 03 de
Febrero 2015
Cada año que pasa hay tecnologías que logran posicionarse y cambiar la manera de vivir de sus usuarios. En 2014, gracias a las pulseras y aplicaciones para smartphones, fue sin lugar a dudas el año del fitness. Aplicaciones como Nike+, Endomondo o RunKeeper le permitían a cualquiera con un smartphone saber cuántas calorías quemaron, cuánto corrieron, ver el mapa por donde lo hicieron y más.
My Fly
El 2015, según aseguran los expertos, será el año de las aplicaciones de la salud y su importante crecimiento será gracias a los dispositivos vestibles, como los relojes, las pulseras o, quizás en el futuro no muy lejano, las gafas (que por ahora todavía están en fase de pruebas).
Y las aplicaciones para la salud no solo se reducen a los usuarios, sino también a grandes compañías. Qualcomm, empresa que produce hardware, es un claro ejemplo. Creó una rama de su empresa, llamada Qualcomm Life, para trabajar codo a codo con empresas de salud. Proveedores farmacéuticos trabajan en parches que estén sincronizados con el teléfono para medir el efecto de medicamentos.
Grandes empresas de salud también trabajan en dispositivos que incluyen cajas de pastillas o inhaladores que están conectados con aplicaciones que están en los teléfonos de sus pacientes para transmitirle diferentes datos al usuario de manera automática.
Samsung anunció una división llamada Samsung Digital Health el año pasado. Allí pusieron US$50 millones para que sus ingenieros trabajen en aplicaciones tanto de software como de hardware. Incluso la semana pasada se dio a conocer la noticia de un diadema capaz de prevenir un accidente cerebrovascular.
Como si fuera poco, Google X, el laboratorio secreto de la compañía del buscador, tiene un equipo que trabaja en un "detector de cáncer" a través de pastillas con nanopartículas y una pulsera conectada a cada célula. Tienen el fin, según el líder del equipo, de cambiar la medicina de episódica y reactiva (al paciente duele el brazo y por eso a al médico) a proactiva (hacer algo antes que le duela el brazo).
Una de las tecnologías más curiosas es My Fly. Se trata de un reloj que tiene un drone integrado. Cuando el usuario tenga un accidente el pequeño objeto volador no tripulado volará hasta una dirección pre-establecida e "informará" del lugar exacto donde su dueño tuvo el accidente.
No sería raro que con el pasar de los meses (y los años, porque este tipo de tecnologías no paran de evolucionar) en vez de saber cuántos kilómetros corrió un usuario o por qué lugares de la ciudad, también puedan saber si tienen que tomar una pastilla, si está por tener un ACV, si algunas de sus células podrían ser malignas y atacar preventivamente una enfermedad o que su dispositivo esté directamente conectado con su médico para prevenir diferentes problemas.
Con información de
minutouno