REFORMA CONSTITUCIONAL EN SANTA FE
REFORMA CONSTITUCIONAL EN SANTA FE
Candidatos que no tienen idea de derecho constitucional
Lunes 06 de
Enero 2025
Por:
LA LECHUZA OLY
No se sabe qué proponen reformar ni si tienen dimensión de lo que implica un evento institucional de tamaña magnitud. Pero una enorme cantidad de dirigentes trabajan para quedar en el bronce estampados con el título de convencional.
Así de berreta.
Las primeras aproximaciones, incluso, de altísimos funcionarios, plantean temas procesales o que con una simple ley alcanza.
El principal motivo es abrir la puerta a la reelección de “Pullaro”.
Santa Fe puede que esté caminando un rumbo desconocido en su historia.
No recordamos un “gobernador” que –en el marco de una legislatura sumisa- impulse tempranamente cambios, al comienzo del mandato, en resortes institucionales vitales, para lanzarse luego a la reelección. Y que, además, el mismo dirigente se imponga como principal candidato a la aventura reformista.
El límite en la balanza de equilibrios lo pone el Poder Judicial. En casos puestos a su consideración. Próximamente, con grandes posibilidades de tener rasgo oficialista.
Palabras vacías como “eficiencia”, “austeridad”, “orden”, etc. son el paragua vago para un sinnúmero de leyes de emergencia y decisiones exorbitantes.
El Gobierno tiene a favor de la liviandad de sus exposiciones la indiferencia y desconocimiento del tópico de gran parte de la población.
En los medios tradicionales pasan muchas cosas. Pareciera que hay dos realidades: la de los micrófonos prendidos y la que trasciende fuera del aire.
En ningún tiempo antes pudo observarse a tantos prestigiosos periodistas expresarse en una dirección con la luz roja prendida (o en tinta digital) y en otra diferente fuera del ámbito profesional.
El contraste de interpretación y análisis, de la realidad política y social, en ciertos espacios chocan escandalosamente: redes vs. medios tradicionales.
Es probable que un segmento de la política de comunicación oficial tenga el convencimiento de que lo que no plantean 3 o 4 medios no existe. Es un error de proporciones. Esos medios pierden “credibilidad” a una velocidad nunca antes vista y la gente se expresa sin filtro en las redes sociales.
“Pullaro, sí” o “Pullaro, no”, a la reelección. Ese es el elevado debate de la reforma constitucional.
La sociedad puede que interprete que un “Gobernador-Convencional”, quita tiempo a la atención de los sustanciales contratiempos que tiene la provincia.
Scaglia (la Vice) si toma la decisión de seguir los designios del Pro a nivel nacional tendrá compromisos políticos que confrontarán muy posiblemente con los intereses de la Casa Gris.
El Pro en Córdoba se intervino. No conocemos los fundamentos.
El Socialismo (Clara García, Joaquín Blanco, etc.) tiene en las próximas elecciones una partida difícil. Ser un segmento controlado políticamente por el sillón del brigadier, conformándose con un reducido número de lugares en la lista del Gobernador (convencionales) o jugar fuerte y recuperar espacio en el mapa electoral, luego de un 2024 en el que perdió estirpe de color rojo bajando muchas banderas históricas (por ejemplo, votando el ajuste previsional a docentes y no docentes). Puede que un grupo de dirigentes se esté encerrando en sí mismo.
El socialismo, pese a todo el apoyo que le brindó a Pullaro (el radicalismo no tenía la misma inclinación cuando gobernaba el Socialismo) tendrá en la Corte un integrante al igual que Perotti.
Pullaro, no logró hacer pie a nivel nacional. No forma parte de las grandes discusiones de la Argentina. Y Gobierna una provincia enorme.
La pelea política con Milei es frontal.
Las diferencias se hacen más visible en materia de Seguridad. En ningún momento el Presidente reconoce a Pullaro como autor de políticas “exitosas”. Al contrario, se adjudica cualquier índice que le permita mostrarse.
Las primeras aproximaciones, incluso, de altísimos funcionarios, plantean temas procesales o que con una simple ley alcanza.
El principal motivo es abrir la puerta a la reelección de “Pullaro”.
Santa Fe puede que esté caminando un rumbo desconocido en su historia.
No recordamos un “gobernador” que –en el marco de una legislatura sumisa- impulse tempranamente cambios, al comienzo del mandato, en resortes institucionales vitales, para lanzarse luego a la reelección. Y que, además, el mismo dirigente se imponga como principal candidato a la aventura reformista.
El límite en la balanza de equilibrios lo pone el Poder Judicial. En casos puestos a su consideración. Próximamente, con grandes posibilidades de tener rasgo oficialista.
Palabras vacías como “eficiencia”, “austeridad”, “orden”, etc. son el paragua vago para un sinnúmero de leyes de emergencia y decisiones exorbitantes.
El Gobierno tiene a favor de la liviandad de sus exposiciones la indiferencia y desconocimiento del tópico de gran parte de la población.
En los medios tradicionales pasan muchas cosas. Pareciera que hay dos realidades: la de los micrófonos prendidos y la que trasciende fuera del aire.
En ningún tiempo antes pudo observarse a tantos prestigiosos periodistas expresarse en una dirección con la luz roja prendida (o en tinta digital) y en otra diferente fuera del ámbito profesional.
El contraste de interpretación y análisis, de la realidad política y social, en ciertos espacios chocan escandalosamente: redes vs. medios tradicionales.
Es probable que un segmento de la política de comunicación oficial tenga el convencimiento de que lo que no plantean 3 o 4 medios no existe. Es un error de proporciones. Esos medios pierden “credibilidad” a una velocidad nunca antes vista y la gente se expresa sin filtro en las redes sociales.
“Pullaro, sí” o “Pullaro, no”, a la reelección. Ese es el elevado debate de la reforma constitucional.
La sociedad puede que interprete que un “Gobernador-Convencional”, quita tiempo a la atención de los sustanciales contratiempos que tiene la provincia.
Scaglia (la Vice) si toma la decisión de seguir los designios del Pro a nivel nacional tendrá compromisos políticos que confrontarán muy posiblemente con los intereses de la Casa Gris.
El Pro en Córdoba se intervino. No conocemos los fundamentos.
El Socialismo (Clara García, Joaquín Blanco, etc.) tiene en las próximas elecciones una partida difícil. Ser un segmento controlado políticamente por el sillón del brigadier, conformándose con un reducido número de lugares en la lista del Gobernador (convencionales) o jugar fuerte y recuperar espacio en el mapa electoral, luego de un 2024 en el que perdió estirpe de color rojo bajando muchas banderas históricas (por ejemplo, votando el ajuste previsional a docentes y no docentes). Puede que un grupo de dirigentes se esté encerrando en sí mismo.
El socialismo, pese a todo el apoyo que le brindó a Pullaro (el radicalismo no tenía la misma inclinación cuando gobernaba el Socialismo) tendrá en la Corte un integrante al igual que Perotti.
Pullaro, no logró hacer pie a nivel nacional. No forma parte de las grandes discusiones de la Argentina. Y Gobierna una provincia enorme.
La pelea política con Milei es frontal.
Las diferencias se hacen más visible en materia de Seguridad. En ningún momento el Presidente reconoce a Pullaro como autor de políticas “exitosas”. Al contrario, se adjudica cualquier índice que le permita mostrarse.