Alberto Fernández presentó dos escritos ante la Cámara Federal porteña e insistió con su planteo para apartar al juez Ercolini de la causa por violencia de género
Por:
Federico González del Solar
Jueves 26 de
Diciembre 2024
La defensa del exmandatario reforzó la estrategia con la que busca dezplazar al magistrado; sostiene que es juez y parte en la misma causa, y que el expediente no debe tramitar en Comodoro Py
La defensa de Alberto Fernández ratificó este jueves los argumentos con los cuales busca apartar al juez federal Julián Ercolini de la causa por violencia de género, en donde se acusa al exmandatario de haber agredido física y psicológicamente a su expareja Fabiola Yañez.
Lo hizo presentando dos escritos en la audiencia que la Cámara Federal porteña fijó para hoy con el fin de que las partes pudieran ampliar los argumentos. Por este trámite, el juez Ercolini debió suspender por segunda vez la indagatoria al expresidente.
En el escrito, la abogada de Fernández, Silvina Carreira, insistió con que Ercolini debe correrse del trámite de esta causa, debido a que se trata de un desprendimiento del caso seguros, el otro expediente en manos del magistrado, en donde Fernández está acusado de haber direccionado la contratación de seguros en las dependencias del Estado. A su vez, volvió a la carga con su estrategia para sacar la causa de los tribunales federales de Comodoro Py para llevarla a la Justicia contravencional de la Ciudad.
Para Carreira, Ercolini es juez y parte en la causa por violencia puesto que fue él quien impulsó el caso desde su rol de juez en la causa seguros, tras detectar la posible comisión de un nuevo delito a partir del intercambio entre Yañez y María Cantero, la histórica secretaria de Fernández. Como este segundo expediente también recayó en su juzgado, la abogada entiende que la imparcialidad de Ercolini está comprometida.
“Resulta contrario a los principios de imparcialidad que el mismo magistrado que libró actuaciones denunciando un delito, sea el mismo que decida sobre la suerte de un caso que el mismo Juez consideró como una conducta delictiva que debía ser investigada”, dice el escrito que presentó la letrada, al que accedió LA NACION. “El Dr. Ercolini ha tomado postura sobre la causa de marras y ello conlleva a la violación del principio constitucional de Juez imparcial”, insistió.
“Afirmamos que para el Juez existió delito en la Causa [seguros], y por ello el Dr. Ercolini la envía a sorteo para mantener una supuesta imparcialidad. Y por las maravillas del azar, el juez designado es… El Dr. Ercolini. Como dije, deberá investigar una supuesta acción delictiva detectada por el Dr. Ercolini. Parece un trabalenguas, pero es la realidad”, señaló Carreira, y sumó: “Es muy importante delimitar el rol del juez con el de denunciante”
La abogada cuestionó también el accionar del juez, quien al tomar conocimiento de las presuntas agresiones a través de ese chat que surgió en la causa seguros, decidió comunicarse con el abogado de Yañez, Juan Pablo Fioribello, que era también el de Fernández. “Es dable indicar que resultó, cuanto menos, desprolijo, comunicarse con el Dr. Fioribello que también resultaba ser el abogado del hoy imputado”, afirmó Carreira.
La defensa de Fernández también reparó en una expresión que Ercolini utilizó en uno de sus escritos, con la que el magistrado le recordó a Fernández de un modo “desafortunado” que todavía tenía consigo el teléfono celular que le secuestró el 10 de agosto junto con otros dispositivos, en el operativo que ordenó realizar en su departamento de Puerto Madero al comienzo de esta causa, cuando el fiscal Carlos Rivolo todavía estaba al frente de la instrucción.
“No podemos pasar por alto la mención a esta circunstancia en la que dijo que ‘…hasta el momento, ninguno de esos dispositivos ha sido abierto’. [...] Suena un poco fuerte la frase ‘hasta el momento’, pero más allá de la interpretación que se pueda realizar de esta desafortunada expresión, lo cierto es que de momento no se ha solicitado ningún pedido de nulidad, por lo que la explicación brindada tampoco sostiene la argumentación del magistrado”, se lee en el escrito.
Para apuntalar su planteo, la abogada señaló que el fiscal Ramiro González se excusó cuando a en su fiscalía recayó la denuncia paralela que Fernández realizó por falso testimonio contra la madre de Yañez, Miriam Verónica Yáñez Verdugo, luego de que brindara declaración. Como González instruyó y fue quien le tomó declaración a Yañez Verdugo, solicitó apartarse de esta nueva causa, pedido que fue avalado por el juez Ariel Lijo.
Pese a las diferencias que existen entre la actividad de un juez y la de un fiscal, Carreira entiende que Ercolini debe obrar de la misma manera y correrse de la causa. “Resulta inconcebible pensar que un Fiscal Federal se excuse en otro proceso en virtud del mismo artículo y el mismo inciso que el que aquí propiciamos para apartar al Dr. Ercolini”
“Por todo lo expuesto que voy a seguir postulando la recusación del magistrado, peticionando a V.E. que haga lugar a este pedido para garantizar una verdadera imparcialidad”, concluyó Carreira.
El otro punto en el que Fernández basa la recusación es la jurisprudencia. Para Carreira, el expediente debe pasar de Comodoro Py a la Justicia contravencional de la ciudad de Buenos Aires, donde presuntamente ocurrieron los hechos investigados.
De manera unipersonal, el juez de la Cámara Federal, Eduardo Farah debe resolver ambos planteos. En septiembre, el juez rechazó por “prematuro” el primer intento de Carreira de sacar el expediente de Comodoro Py para llevarlo a la Justicia de San Isidro. En aquella oportunidad Farah se plegó a lo dictaminado por le fiscal González, y resolvó que la investigación debía avanzar para resolver la cuestión de la jurisdicción. “El tiempo, el contexto y las formas violentas de ejercicio de poder que han sido denunciadas no pueden asignarse, de momento, a un enclave geográfico único y determinado”, sostuvo en aquel entonces.
Lo hizo presentando dos escritos en la audiencia que la Cámara Federal porteña fijó para hoy con el fin de que las partes pudieran ampliar los argumentos. Por este trámite, el juez Ercolini debió suspender por segunda vez la indagatoria al expresidente.
En el escrito, la abogada de Fernández, Silvina Carreira, insistió con que Ercolini debe correrse del trámite de esta causa, debido a que se trata de un desprendimiento del caso seguros, el otro expediente en manos del magistrado, en donde Fernández está acusado de haber direccionado la contratación de seguros en las dependencias del Estado. A su vez, volvió a la carga con su estrategia para sacar la causa de los tribunales federales de Comodoro Py para llevarla a la Justicia contravencional de la Ciudad.
Para Carreira, Ercolini es juez y parte en la causa por violencia puesto que fue él quien impulsó el caso desde su rol de juez en la causa seguros, tras detectar la posible comisión de un nuevo delito a partir del intercambio entre Yañez y María Cantero, la histórica secretaria de Fernández. Como este segundo expediente también recayó en su juzgado, la abogada entiende que la imparcialidad de Ercolini está comprometida.
“Resulta contrario a los principios de imparcialidad que el mismo magistrado que libró actuaciones denunciando un delito, sea el mismo que decida sobre la suerte de un caso que el mismo Juez consideró como una conducta delictiva que debía ser investigada”, dice el escrito que presentó la letrada, al que accedió LA NACION. “El Dr. Ercolini ha tomado postura sobre la causa de marras y ello conlleva a la violación del principio constitucional de Juez imparcial”, insistió.
“Afirmamos que para el Juez existió delito en la Causa [seguros], y por ello el Dr. Ercolini la envía a sorteo para mantener una supuesta imparcialidad. Y por las maravillas del azar, el juez designado es… El Dr. Ercolini. Como dije, deberá investigar una supuesta acción delictiva detectada por el Dr. Ercolini. Parece un trabalenguas, pero es la realidad”, señaló Carreira, y sumó: “Es muy importante delimitar el rol del juez con el de denunciante”
La abogada cuestionó también el accionar del juez, quien al tomar conocimiento de las presuntas agresiones a través de ese chat que surgió en la causa seguros, decidió comunicarse con el abogado de Yañez, Juan Pablo Fioribello, que era también el de Fernández. “Es dable indicar que resultó, cuanto menos, desprolijo, comunicarse con el Dr. Fioribello que también resultaba ser el abogado del hoy imputado”, afirmó Carreira.
La defensa de Fernández también reparó en una expresión que Ercolini utilizó en uno de sus escritos, con la que el magistrado le recordó a Fernández de un modo “desafortunado” que todavía tenía consigo el teléfono celular que le secuestró el 10 de agosto junto con otros dispositivos, en el operativo que ordenó realizar en su departamento de Puerto Madero al comienzo de esta causa, cuando el fiscal Carlos Rivolo todavía estaba al frente de la instrucción.
“No podemos pasar por alto la mención a esta circunstancia en la que dijo que ‘…hasta el momento, ninguno de esos dispositivos ha sido abierto’. [...] Suena un poco fuerte la frase ‘hasta el momento’, pero más allá de la interpretación que se pueda realizar de esta desafortunada expresión, lo cierto es que de momento no se ha solicitado ningún pedido de nulidad, por lo que la explicación brindada tampoco sostiene la argumentación del magistrado”, se lee en el escrito.
Para apuntalar su planteo, la abogada señaló que el fiscal Ramiro González se excusó cuando a en su fiscalía recayó la denuncia paralela que Fernández realizó por falso testimonio contra la madre de Yañez, Miriam Verónica Yáñez Verdugo, luego de que brindara declaración. Como González instruyó y fue quien le tomó declaración a Yañez Verdugo, solicitó apartarse de esta nueva causa, pedido que fue avalado por el juez Ariel Lijo.
Pese a las diferencias que existen entre la actividad de un juez y la de un fiscal, Carreira entiende que Ercolini debe obrar de la misma manera y correrse de la causa. “Resulta inconcebible pensar que un Fiscal Federal se excuse en otro proceso en virtud del mismo artículo y el mismo inciso que el que aquí propiciamos para apartar al Dr. Ercolini”
“Por todo lo expuesto que voy a seguir postulando la recusación del magistrado, peticionando a V.E. que haga lugar a este pedido para garantizar una verdadera imparcialidad”, concluyó Carreira.
El otro punto en el que Fernández basa la recusación es la jurisprudencia. Para Carreira, el expediente debe pasar de Comodoro Py a la Justicia contravencional de la ciudad de Buenos Aires, donde presuntamente ocurrieron los hechos investigados.
De manera unipersonal, el juez de la Cámara Federal, Eduardo Farah debe resolver ambos planteos. En septiembre, el juez rechazó por “prematuro” el primer intento de Carreira de sacar el expediente de Comodoro Py para llevarlo a la Justicia de San Isidro. En aquella oportunidad Farah se plegó a lo dictaminado por le fiscal González, y resolvó que la investigación debía avanzar para resolver la cuestión de la jurisdicción. “El tiempo, el contexto y las formas violentas de ejercicio de poder que han sido denunciadas no pueden asignarse, de momento, a un enclave geográfico único y determinado”, sostuvo en aquel entonces.