Imputan a Sergio Berni por la ''desidia'' e ''impericia'' en la escena del crimen de Alberto Nisman
Por:
Hernán Cappiello
Jueves 19 de
Diciembre 2024
El funcionario era secretario de Seguridad del kirchnerismo, la medida también alcanza a Dario Ruiz, su colaborador; la imputación la formuló el fiscal Taiano
El fiscal Eduardo Taiano imputó al exsecretario de seguridad del kirchnerismo Sergio Berni y a su entonces colaborador Dario Ruiz por la falta de conservación de la escena del crimen donde fue encontrado muerto el fiscal federal Alberto Nisman, el 18 de enero de 2015.
La imputación de Taiano ahora deberá traducirse en una citación que realice el juez Julián Ercolini a ambos exfuncionarios para informarle sobre esta causa penal y para que, eventualmente, designen abogados defensores.
El juez federal Ercolini ya notificó de una medida similar a comienzos de este mes al exjefe de la Policía Federal Román Di Santo y al exjefe de la Prefectura Naval Luis Heiler, que están imputados en esa causa penal donde se investiga la manipulación en la escena.
El fiscal Eduardo Taiano, que tiene delegada la causa, fue quien requirió estas imputaciones, algunas de las cuales que se efectuaron ante el juez Ercolini. No se trata de una declaración indagatoria sino del aviso de la imputación.
Taiano habló en esta causa de la inoperancia, la desidia y la indiferencia con que actuaron en el lugar los funcionarios que llegaron al departamento de la Torre Le Parc que “solo permite representarnos un alto grado de incompetencia de su parte”. El fiscal insistió en que “no se tomaron los recaudos necesarios para la adecuada preservación de la escena”, lo que podría llevar a Taiano a pedir la indagatoria de los imputados. En el procedimiento “hubo un sinfín de irregularidades”, señala la denuncia, que se vieron en videos exhibidos por televisión.
El comisario general retirado Di Santo, en ocasión de presentarse en el juzgado, dejó un escrito en el que señaló que ese día acudió al departamento de Nisman siguiendo instrucciones del secretario de seguridad Sergio Berni y Darío Ruiz y que se puso a disposición de la fiscal Viviana Fein, que fue la primer funcionaria judicial que intervino en el caso.
Esta causa se inició por una denuncia de la entonces diputada Lilita Carrió y se investiga si existió una maniobra de encubrimiento para alterar la escena del crimen.
En su escrito, Di Santo acompañó declaraciones del entonces ministro Aníbal Fernández y de la propia fiscal Fein, donde señalaban que no había existido un desmanejo de la escena y que no se había alterado con la intervención de los policías.
El fiscal Taiano consideró, en cambio, “la existencia de concretas y graves irregularidades cometidas por los funcionarios públicos en el departamento donde fue hallado sin vida el fiscal Nisman”. Y sostuvo que “esas irregularidades podrían poner en riesgo el descubrimiento completo de la verdad”.
“Ahora sabemos con exactitud y sin lugar a dudas que se pasaron por alto evidencias determinantes para la investigación, como por ejemplo la existencia de una tercera vía de acceso al departamento que nadie advirtió durante el procedimiento, o que no se tomó la temperatura del cuerpo ni del baño”, dijo el fiscal.
La causa por la muerte de Nisman es considerada por la justicia un homicidio. Está procesado como partícipe el técnico informático Diego Lagomarsino quien le acercó el arma con la que se efectuó el disparo que terminó con la vida de Nisman. Están procesados los excustodios del fiscal.
El fiscal Taiano investiga como hipótesis que la muerte de Nisman se produjo en medio de una guerra de diversos grupos de inteligencia locales que respondían a Cristina Kirchner o a Jaime Stiuso. Al declarar en la causa, Stiuso sugirió que grupos kirchneristas estaban tras el crimen.
El fiscal tomó declaraciones a decenas de agentes de inteligencia por la explosión de llamadas telefónicas registradas entre ellos entre el 18 y 19 de enero de 2015 en una actividad intensa, atípica para un fin de semana.
Además investiga un virus introducido en el teléfono del fiscal, donde hay dos colaboradores de la SIDE, exfuncionarios de Entre Ríos, acusados de realizar esa tarea.
En otra causa paralela se investiga si se alteró la escena del crimen, donde están imputados los jefes policiales, al propio Serio Berni y la fiscal Viviana Fein, entre otros.
La imputación de Taiano ahora deberá traducirse en una citación que realice el juez Julián Ercolini a ambos exfuncionarios para informarle sobre esta causa penal y para que, eventualmente, designen abogados defensores.
El juez federal Ercolini ya notificó de una medida similar a comienzos de este mes al exjefe de la Policía Federal Román Di Santo y al exjefe de la Prefectura Naval Luis Heiler, que están imputados en esa causa penal donde se investiga la manipulación en la escena.
El fiscal Eduardo Taiano, que tiene delegada la causa, fue quien requirió estas imputaciones, algunas de las cuales que se efectuaron ante el juez Ercolini. No se trata de una declaración indagatoria sino del aviso de la imputación.
Taiano habló en esta causa de la inoperancia, la desidia y la indiferencia con que actuaron en el lugar los funcionarios que llegaron al departamento de la Torre Le Parc que “solo permite representarnos un alto grado de incompetencia de su parte”. El fiscal insistió en que “no se tomaron los recaudos necesarios para la adecuada preservación de la escena”, lo que podría llevar a Taiano a pedir la indagatoria de los imputados. En el procedimiento “hubo un sinfín de irregularidades”, señala la denuncia, que se vieron en videos exhibidos por televisión.
El comisario general retirado Di Santo, en ocasión de presentarse en el juzgado, dejó un escrito en el que señaló que ese día acudió al departamento de Nisman siguiendo instrucciones del secretario de seguridad Sergio Berni y Darío Ruiz y que se puso a disposición de la fiscal Viviana Fein, que fue la primer funcionaria judicial que intervino en el caso.
Esta causa se inició por una denuncia de la entonces diputada Lilita Carrió y se investiga si existió una maniobra de encubrimiento para alterar la escena del crimen.
En su escrito, Di Santo acompañó declaraciones del entonces ministro Aníbal Fernández y de la propia fiscal Fein, donde señalaban que no había existido un desmanejo de la escena y que no se había alterado con la intervención de los policías.
El fiscal Taiano consideró, en cambio, “la existencia de concretas y graves irregularidades cometidas por los funcionarios públicos en el departamento donde fue hallado sin vida el fiscal Nisman”. Y sostuvo que “esas irregularidades podrían poner en riesgo el descubrimiento completo de la verdad”.
“Ahora sabemos con exactitud y sin lugar a dudas que se pasaron por alto evidencias determinantes para la investigación, como por ejemplo la existencia de una tercera vía de acceso al departamento que nadie advirtió durante el procedimiento, o que no se tomó la temperatura del cuerpo ni del baño”, dijo el fiscal.
La causa por la muerte de Nisman es considerada por la justicia un homicidio. Está procesado como partícipe el técnico informático Diego Lagomarsino quien le acercó el arma con la que se efectuó el disparo que terminó con la vida de Nisman. Están procesados los excustodios del fiscal.
El fiscal Taiano investiga como hipótesis que la muerte de Nisman se produjo en medio de una guerra de diversos grupos de inteligencia locales que respondían a Cristina Kirchner o a Jaime Stiuso. Al declarar en la causa, Stiuso sugirió que grupos kirchneristas estaban tras el crimen.
El fiscal tomó declaraciones a decenas de agentes de inteligencia por la explosión de llamadas telefónicas registradas entre ellos entre el 18 y 19 de enero de 2015 en una actividad intensa, atípica para un fin de semana.
Además investiga un virus introducido en el teléfono del fiscal, donde hay dos colaboradores de la SIDE, exfuncionarios de Entre Ríos, acusados de realizar esa tarea.
En otra causa paralela se investiga si se alteró la escena del crimen, donde están imputados los jefes policiales, al propio Serio Berni y la fiscal Viviana Fein, entre otros.