"Me echaron". Marcelo Longobardi fue desvinculado de Radio Rivadavia: "El motivo es ridículo, inverosímil"
Jueves 19 de
Diciembre 2024
Desde los Estados Unidos, el periodista habló con LA NACIÓN y contó detalles de su salida de la emisora
El aire de Esta Mañana en Radio Rivadavia (AM630) amanecerá más quieto a partir de mañana. Marcelo Longobardi, figura central de la programación matutina, recibió hoy miércoles la noticia de su desvinculación. Cierra así un ciclo que había comenzado en marzo de 2023 tras su paso por CNN Radio desde los Estados Unidos. Lo que podría parecer una simple rescisión contractual, en palabras del periodista, encierra un trasfondo más complejo en el que menciona tensiones políticas, intereses cruzados y críticas al gobierno. “Todo estaba resuelto hace meses”, manifiesta.
Jonatan Andreani, gerente de programación de Radio Rivadavia, propiedad de la empresa Alpha Media, asegura que la decisión de desvincular a Marcelo Longobardi se basó en “su falta de presencialidad en los estudios de Rivadavia” y en el desempeño de su programa en términos de audiencia. “Se dio por finalizado el vínculo con Marcelo Longobardi por decisiones contractuales”, confirma a LA NACIÓN.
Sin embargo, en una entrevista exclusiva, Marcelo Longobardi ofrece su versión de los hechos y denuncia “presiones externas”. También refiere a un entramado de negociaciones que, según él, involucran al gobierno y a la dirección de la radio. “Me convertí en un crítico duro y eso molestó”, asegura.
–Me mandaron una carta documento y me echaron. Mucho más que eso no te puedo decir. Yo te puedo transmitir cuál es mi impresión sobre por qué se aceleró este proceso que, creo yo, estaba resuelto hace un par de meses.
–El motivo formal fue la falta de presencialidad. Dijeron que no estaba cumpliendo con esa condición, pero eso no tiene ningún sustento: desde el momento en que me contrataron, sabían que yo vivía en los Estados Unidos la mitad del año. Después de mi paso por CNN, mi familia se quedó viviendo acá. Mis hijas van a la universidad en los Estados Unidos y por eso voy y vengo. Desde octubre pasado estoy acá. Y ni bien llegué, empezó la presión con ese tema.
–No, no existía tal condición. De hecho, tengo en mi casa un estudio que armé con un equipo T-Line para transmitir desde acá, que es lo más moderno del planeta. La tecnología me permite trabajar desde cualquier lugar como si estuviera en el estudio. La tecnología está instalada en la consola de la radio, es decir que yo puedo entrar como si fuera un micrófono más del estudio. Es tan inverosímil el argumento de la presencialidad que no tiene ningún sustento, primero por los antecedentes míos y porque Nelson (Castro), a la tarde, hace lo mismo.
–Desde octubre, cuando llegué a los Estados Unidos. Empezó la presión por el tema de la presencialidad. Lo utilizaron como excusa. Es un argumento totalmente estúpido, lacónico, ridículo, inverosímil, porque no tiene ningún sustento. La tecnología que utilizo es de última generación, y la propia radio la tiene incorporada. No hay ninguna lógica detrás de eso.
–Estoy convencido de que esto tiene que ver con una negociación entre la radio y el gobierno. Es evidente que mi postura crítica hacia Milei ha sido un problema. Al parecer, según me dicen ahora, algunos colegas sabían que la radio estaba ofreciendo mi espacio a otros periodistas. Esto no pasó de un día para otro, creo que todo estaba resuelto desde hace meses.
–Milei tiene conmigo una especie de obsesión psicótica: me ha llamado, en un tuit, ‘hijo de p...’. Los niveles de ataque que recibo son brutales, debo ser el tipo más atacado por el gobierno.
–Carlos (Pagni) escribió que Milei tenía una obsesión conmigo. Entiendo que mi cabeza fue negociada, aunque no sé si el gobierno lo pidió o la radio lo ofreció. Es una de las dos cosas... Lo que le debe molestar a Milei es que comparto su punto de vista económico, pero no sus rasgos autoritarios. Lo que cuestiono es su rasgo autocrático. Encuentro que, montado sobre un éxito, como Bukele, puede deslizar al país hacia una autocracia. Ese es el tema que yo cuestiono, más allá de lo económico.
–Creo que mi difusión del discurso de Claudio Escribano en Adepa, mi entrevista con Hugo Alconada Mon por el caso de Andrés Vázquez, director de la DGI, y la lectura del artículo de Joaquín Morales Solá esta mañana los irritó. Al rato me mandaron la carta documento. Terminó el programa y me mandaron la carta documento por mail.
–Es un argumento sin sustento. Pero detrás hay algo más. Lo que sé es que esto tiene que ver con una negociación entre la radio y el gobierno. Siempre cumplí con condiciones acordadas con la radio y de repente cambiaron las reglas del juego.
–No tengo la menor idea. Por el momento, esto es todo lo que sé. Sé los argumentos del despido, sé que no son ciertos, y sé que detrás hay una cuestión política.
La institución propiedad de la empresa Alpha Media emitió este miércoles por la noche un comunicado en donde expresaron los motivos de la decisión.
Según explicaron, se habría sido tomada en función de no haber alcanzado el nivel de audiencia esperado: “Esta determinación se adopta en estricto apego a las condiciones previamente acordadas y, de manera destacada, ante el desempeño en términos de audiencia que no acompañó las expectativas trazadas por nuestra emisora”.
Jonatan Andreani, gerente de programación de Radio Rivadavia, propiedad de la empresa Alpha Media, asegura que la decisión de desvincular a Marcelo Longobardi se basó en “su falta de presencialidad en los estudios de Rivadavia” y en el desempeño de su programa en términos de audiencia. “Se dio por finalizado el vínculo con Marcelo Longobardi por decisiones contractuales”, confirma a LA NACIÓN.
Sin embargo, en una entrevista exclusiva, Marcelo Longobardi ofrece su versión de los hechos y denuncia “presiones externas”. También refiere a un entramado de negociaciones que, según él, involucran al gobierno y a la dirección de la radio. “Me convertí en un crítico duro y eso molestó”, asegura.
–Marcelo, ¿cómo recibió la noticia de su desvinculación?
–Me mandaron una carta documento y me echaron. Mucho más que eso no te puedo decir. Yo te puedo transmitir cuál es mi impresión sobre por qué se aceleró este proceso que, creo yo, estaba resuelto hace un par de meses.
–¿Cuál fue el argumento que le dieron?
–El motivo formal fue la falta de presencialidad. Dijeron que no estaba cumpliendo con esa condición, pero eso no tiene ningún sustento: desde el momento en que me contrataron, sabían que yo vivía en los Estados Unidos la mitad del año. Después de mi paso por CNN, mi familia se quedó viviendo acá. Mis hijas van a la universidad en los Estados Unidos y por eso voy y vengo. Desde octubre pasado estoy acá. Y ni bien llegué, empezó la presión con ese tema.
–¿La condición de “presencialidad” estaba prevista en su contrato?
–No, no existía tal condición. De hecho, tengo en mi casa un estudio que armé con un equipo T-Line para transmitir desde acá, que es lo más moderno del planeta. La tecnología me permite trabajar desde cualquier lugar como si estuviera en el estudio. La tecnología está instalada en la consola de la radio, es decir que yo puedo entrar como si fuera un micrófono más del estudio. Es tan inverosímil el argumento de la presencialidad que no tiene ningún sustento, primero por los antecedentes míos y porque Nelson (Castro), a la tarde, hace lo mismo.
–¿Cuándo comenzaron las tensiones con la emisora?
–Desde octubre, cuando llegué a los Estados Unidos. Empezó la presión por el tema de la presencialidad. Lo utilizaron como excusa. Es un argumento totalmente estúpido, lacónico, ridículo, inverosímil, porque no tiene ningún sustento. La tecnología que utilizo es de última generación, y la propia radio la tiene incorporada. No hay ninguna lógica detrás de eso.
–¿Cree que hubo otros motivos detrás de su desvinculación?
–Estoy convencido de que esto tiene que ver con una negociación entre la radio y el gobierno. Es evidente que mi postura crítica hacia Milei ha sido un problema. Al parecer, según me dicen ahora, algunos colegas sabían que la radio estaba ofreciendo mi espacio a otros periodistas. Esto no pasó de un día para otro, creo que todo estaba resuelto desde hace meses.
–¿Cómo es su relación con el gobierno?
–Milei tiene conmigo una especie de obsesión psicótica: me ha llamado, en un tuit, ‘hijo de p...’. Los niveles de ataque que recibo son brutales, debo ser el tipo más atacado por el gobierno.
–¿Siente que incomoda al presidente?
–Carlos (Pagni) escribió que Milei tenía una obsesión conmigo. Entiendo que mi cabeza fue negociada, aunque no sé si el gobierno lo pidió o la radio lo ofreció. Es una de las dos cosas... Lo que le debe molestar a Milei es que comparto su punto de vista económico, pero no sus rasgos autoritarios. Lo que cuestiono es su rasgo autocrático. Encuentro que, montado sobre un éxito, como Bukele, puede deslizar al país hacia una autocracia. Ese es el tema que yo cuestiono, más allá de lo económico.
–¿Qué otros factores cree que influyeron en este desenlace?
–Creo que mi difusión del discurso de Claudio Escribano en Adepa, mi entrevista con Hugo Alconada Mon por el caso de Andrés Vázquez, director de la DGI, y la lectura del artículo de Joaquín Morales Solá esta mañana los irritó. Al rato me mandaron la carta documento. Terminó el programa y me mandaron la carta documento por mail.
–¿La carta documento dice el motivo del despido?
–Es un argumento sin sustento. Pero detrás hay algo más. Lo que sé es que esto tiene que ver con una negociación entre la radio y el gobierno. Siempre cumplí con condiciones acordadas con la radio y de repente cambiaron las reglas del juego.
–¿Sabe que va a pasar con el resto del equipo?
–No tengo la menor idea. Por el momento, esto es todo lo que sé. Sé los argumentos del despido, sé que no son ciertos, y sé que detrás hay una cuestión política.
El comunicado oficial de Radio Rivadavia
La institución propiedad de la empresa Alpha Media emitió este miércoles por la noche un comunicado en donde expresaron los motivos de la decisión.
Según explicaron, se habría sido tomada en función de no haber alcanzado el nivel de audiencia esperado: “Esta determinación se adopta en estricto apego a las condiciones previamente acordadas y, de manera destacada, ante el desempeño en términos de audiencia que no acompañó las expectativas trazadas por nuestra emisora”.
Con información de
La Nación