Líbano: afirman que Israel bombardeó el centro de Beirut "con fósforo blanco" y ordenó más evacuaciones en poblados cerca de la frontera
Jueves 03 de
Octubre 2024
Los ataques aéreos israelíes nocturnos en el centro de la capital mataron a nueve personas y ocurrieron cerca de la sede de la ONU, la oficina del premier y el Parlamento. Los residentes reportaron un olor similar al del azufre tras el ataque y la Agencia Nacional de Noticias estatal acusó a Israel de emplear bombas de fósforo.
Israel lanzó en la noche del miércoles un poco frecuente bombardeo aéreo sobre el centro de Beirut, no lejos de las oficinas de gobierno y sin previo aviso. Nueve personas murieron y 14 resultaron heridas, según el Ministerio de Salud libanés. Según la defensa civil de Beirut, algunos de los fallecidos eran agentes de rescate y paramédicos. Desde finales de septiembre, Israel bombardea zonas del país donde Hezbollah tiene una fuerte presencia, pero rara vez ha atacado el corazón de la capital.
El objetivo del ataque era un edificio residencial que contenía un centro médico que se cree que está afiliado a Hezbollah.
Las fuerzas israelíes no advirtieron de su operativo del miércoles en la noche, que alcanzó su objetivo ubicado cerca de la sede Naciones Unidas, de la oficina del primer ministro y del Parlamento.
La Cruz Roja de Líbano indicó que un ataque israelí hirió a cuatro de sus paramédicos y mató a un soldado libanés cuando evacuaban a heridos en el sur. El convoy, que estaba custodiado por el ejército de Líbano, fue atacado el jueves cerca de la localidad de Taybeh a pesar de haber coordinado sus movimientos con las fuerzas de paz de la ONU.
Israel ordenó también la evacuación de las localidades del sur de Líbano situadas al norte de la zona de seguridad delimitada por la ONU tras la guerra de 2006. Los avisos del jueves indicaban una posible ampliación de la incursión israelí, que hasta ahora se había limitado a las inmediaciones de la frontera.
Al menos ocho soldados israelíes han muerto en enfrentamientos con la milicia en el sur de Líbano, donde Israel anunció a principios de semana el inicio de lo que dice que será una incursión terrestre limitada. Mientras, la región se prepara para las represalias israelíes por el ataque de Irán con misiles balísticos.
Los residentes reportaron un olor similar al del azufre tras el ataque en Beirut, y la Agencia Nacional de Noticias estatal libanesa acusó a Israel de emplear bombas de fósforo, sin aportar evidencia. En el pasado, grupos de derechos humanos han acusado a Israel de utilizar proyectiles incendiarios de fósforo blanco contra poblaciones en el sur de Líbano. El ejército israelí no respondió de inmediato a una petición de comentarios.
Hezbollah cuenta con un brazo armado con decenas de miles de combatientes, pero también tiene un movimiento político y una red de organizaciones benéficas con personal civil.
Por otra parte, los rebeldes hutíes de Yemen, que cuentan con el respaldo de Irán, dijeron que lanzaron dos aviones no tripulados hacia Tel Aviv durante la noche. El ejército dijo que identificó dos drones ante la costa de la bulliciosa zona metropolitana y que derribó uno. El otro cayó al mar Mediterráneo, agregó.
La escalada de la violencia en Líbano ha abierto un segundo frente en la guerra entre Israel y las milicias respaldadas por Teherán, que comenzó hace casi un año con el sorpresivo ataque de Hamas desde Gaza hacia el sur de Israel el 7 de octubre.
El ejército de Israel dijo el jueves que mató a un alto cargo de Hamas en un ataque aéreo en la Franja de Gaza hace alrededor de tres meses. La operación contra un complejo subterráneo en el norte del enclave palestino eliminó a Rawhi Mushtaha y a otros dos comandantes del grupo insurgente.
Hamas no realizó comentarios de inmediato. Mushtaha era un estrecho colaborador de Yahya Sinwar, el máximo dirigente de Hamas que ayudó a planear el ataque del 7 de octubre. Se cree que Sinwar está vivo y se oculta en Gaza.
En las últimas semanas, los ataques israelíes en Líbano mataron al líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, y a varios de sus altos mandos. Cientos de ataques aéreos registrados en amplias zonas del país desde mediados de septiembre se han cobrado la vida de al menos 1.276 personas, según el Ministerio de Salud libanés.
El ejército israelí comunicó el jueves que había alcanzado alrededor de 200 objetivos de Hezbollah en todo Líbano, incluyendo arsenales y puestos de observación, y que abatió a al menos 15 combatientes de Hezbollah. Las cifras no se pudieron confirmar de forma independiente.
Cientos de miles de personas han huido de sus hogares e Israel pidió a la población que desalojase alrededor de 50 ciudades y poblados en el sur, instándola a reubicarse a unos 60 kilómetros de la frontera, bastante más al norte de la zona de seguridad declarada por la ONU.
Israel dice que ataca a Hezbollah porque lleva casi un año lanzado cohetes a su territorio, desde el 8 de octubre, y ha desplazado a unos 60.000 israelíes del norte del país. Durante este tiempo, las tropas israelíes han perpetrado ataques de represalia que han desplazado a decenas de miles de personas en el lado libanés de la frontera.
La inmensa mayoría de los ataques más recientes se han producido en zonas en las que Hezbollah tiene una fuerte presencia, incluyendo los suburbios del sur de Beirut, una zona conocida como el Dahiyeh. Pero también ha atacado campos de refugiados palestinos en Líbano y, a principios de semana, mató a tres activistas palestinos en el centro de la capital libanesa.
Hezbollah, Hamas y los hutíes forman parte del Eje de la Resistencia de Irán, que incluye también grupos armados en Siria e Irak. Han lanzado ataques contra Israel en solidaridad con los palestinos, provocando represalias en un ciclo que ha amenazado repetidamente con desencadenar una guerra más amplia.
La región parece de nuevo al borde de un conflicto de ese tipo luego del ataque iraní del martes, que según Teherán respondía al asesinato de Nasrallah, de un general de la Guardia Revolucionaria de Irán que estaba con él, y de Ismail Haniyeh, el líder político de Hamas que murió en julio una explosión en la capital iraní atribuida ampliamente a Israel.
Tanto Israel como Estados Unidos han dicho que el ataque de la República Islámica - que dejó dos heridos leves y un muerto palestino en la Cisjordania ocupada — tendrá graves consecuencias. Washington ha enviado medios miliares a la región en apoyo de Israel.
El objetivo del ataque era un edificio residencial que contenía un centro médico que se cree que está afiliado a Hezbollah.
Las fuerzas israelíes no advirtieron de su operativo del miércoles en la noche, que alcanzó su objetivo ubicado cerca de la sede Naciones Unidas, de la oficina del primer ministro y del Parlamento.
La Cruz Roja de Líbano indicó que un ataque israelí hirió a cuatro de sus paramédicos y mató a un soldado libanés cuando evacuaban a heridos en el sur. El convoy, que estaba custodiado por el ejército de Líbano, fue atacado el jueves cerca de la localidad de Taybeh a pesar de haber coordinado sus movimientos con las fuerzas de paz de la ONU.
Israel ordenó también la evacuación de las localidades del sur de Líbano situadas al norte de la zona de seguridad delimitada por la ONU tras la guerra de 2006. Los avisos del jueves indicaban una posible ampliación de la incursión israelí, que hasta ahora se había limitado a las inmediaciones de la frontera.
Al menos ocho soldados israelíes han muerto en enfrentamientos con la milicia en el sur de Líbano, donde Israel anunció a principios de semana el inicio de lo que dice que será una incursión terrestre limitada. Mientras, la región se prepara para las represalias israelíes por el ataque de Irán con misiles balísticos.
¿Uso de fósforo?
Los residentes reportaron un olor similar al del azufre tras el ataque en Beirut, y la Agencia Nacional de Noticias estatal libanesa acusó a Israel de emplear bombas de fósforo, sin aportar evidencia. En el pasado, grupos de derechos humanos han acusado a Israel de utilizar proyectiles incendiarios de fósforo blanco contra poblaciones en el sur de Líbano. El ejército israelí no respondió de inmediato a una petición de comentarios.
Hezbollah cuenta con un brazo armado con decenas de miles de combatientes, pero también tiene un movimiento político y una red de organizaciones benéficas con personal civil.
Por otra parte, los rebeldes hutíes de Yemen, que cuentan con el respaldo de Irán, dijeron que lanzaron dos aviones no tripulados hacia Tel Aviv durante la noche. El ejército dijo que identificó dos drones ante la costa de la bulliciosa zona metropolitana y que derribó uno. El otro cayó al mar Mediterráneo, agregó.
La escalada de la violencia en Líbano ha abierto un segundo frente en la guerra entre Israel y las milicias respaldadas por Teherán, que comenzó hace casi un año con el sorpresivo ataque de Hamas desde Gaza hacia el sur de Israel el 7 de octubre.
El ejército de Israel dijo el jueves que mató a un alto cargo de Hamas en un ataque aéreo en la Franja de Gaza hace alrededor de tres meses. La operación contra un complejo subterráneo en el norte del enclave palestino eliminó a Rawhi Mushtaha y a otros dos comandantes del grupo insurgente.
Hamas no realizó comentarios de inmediato. Mushtaha era un estrecho colaborador de Yahya Sinwar, el máximo dirigente de Hamas que ayudó a planear el ataque del 7 de octubre. Se cree que Sinwar está vivo y se oculta en Gaza.
En las últimas semanas, los ataques israelíes en Líbano mataron al líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, y a varios de sus altos mandos. Cientos de ataques aéreos registrados en amplias zonas del país desde mediados de septiembre se han cobrado la vida de al menos 1.276 personas, según el Ministerio de Salud libanés.
El ejército israelí comunicó el jueves que había alcanzado alrededor de 200 objetivos de Hezbollah en todo Líbano, incluyendo arsenales y puestos de observación, y que abatió a al menos 15 combatientes de Hezbollah. Las cifras no se pudieron confirmar de forma independiente.
Cientos de miles de personas han huido de sus hogares e Israel pidió a la población que desalojase alrededor de 50 ciudades y poblados en el sur, instándola a reubicarse a unos 60 kilómetros de la frontera, bastante más al norte de la zona de seguridad declarada por la ONU.
Israel dice que ataca a Hezbollah porque lleva casi un año lanzado cohetes a su territorio, desde el 8 de octubre, y ha desplazado a unos 60.000 israelíes del norte del país. Durante este tiempo, las tropas israelíes han perpetrado ataques de represalia que han desplazado a decenas de miles de personas en el lado libanés de la frontera.
La inmensa mayoría de los ataques más recientes se han producido en zonas en las que Hezbollah tiene una fuerte presencia, incluyendo los suburbios del sur de Beirut, una zona conocida como el Dahiyeh. Pero también ha atacado campos de refugiados palestinos en Líbano y, a principios de semana, mató a tres activistas palestinos en el centro de la capital libanesa.
El "Eje de la resistencia" de Irán
Hezbollah, Hamas y los hutíes forman parte del Eje de la Resistencia de Irán, que incluye también grupos armados en Siria e Irak. Han lanzado ataques contra Israel en solidaridad con los palestinos, provocando represalias en un ciclo que ha amenazado repetidamente con desencadenar una guerra más amplia.
La región parece de nuevo al borde de un conflicto de ese tipo luego del ataque iraní del martes, que según Teherán respondía al asesinato de Nasrallah, de un general de la Guardia Revolucionaria de Irán que estaba con él, y de Ismail Haniyeh, el líder político de Hamas que murió en julio una explosión en la capital iraní atribuida ampliamente a Israel.
Tanto Israel como Estados Unidos han dicho que el ataque de la República Islámica - que dejó dos heridos leves y un muerto palestino en la Cisjordania ocupada — tendrá graves consecuencias. Washington ha enviado medios miliares a la región en apoyo de Israel.
Con información de
Clarín