El gobierno de Putin denuncia que Estados Unidos está detrás del arresto del dueño de Telegram y le advierte a Francia que no intente intimidarlo
Martes 27 de
Agosto 2024
Dijo que está directamente relacionado con las elecciones presidenciales que se vienen en territorio norteamericano. Pavel Durov fue detenido en un aeropuerto de París por "permitir actividades criminales" en la aplicación de chat.
El gobierno de Vladimir Putin acusó a los Estados Unidos de estar "detrás del arresto" en Francia del CEO y fundador de Telegram, Pavel Durov, y dijo que está directamente relacionado con las elecciones presidenciales que se vienen en territorio norteamericano. Desde el Kremlin también hubo una advertencia al gobierno de Macron.
"Washington está detrás del arresto de Durov. En vísperas de las elecciones presidenciales estadounidenses, es importante que Biden tome el control de Telegram", afirmó el presidente de la Duma, la Cámara de Diputados rusa, Viaceslav Volodin, sin aportar pruebas que respalden sus afirmaciones.
Aseguró también que "Telegram es una de las pocas plataformas de Internet, y la mayor, sobre la que Estados Unidos no tiene influencia" y que "opera en muchos países que le interesan".
"Para Washington, la vigilancia de las redes sociales, su total censura y subordinación, incluso mediante chantaje con el pretexto de la lucha contra diversos tipos de amenazas son métodos tradicionales de gestión política y de influencia externa", agregó Volodin.
El fundador y CEO de Telegram, Pavel Durov, fue detenido el sábado pasado en un aeropuerto de París por presuntamente permitir actividades criminales a través de su aplicación de mensajería cifrada, informaron medios franceses. El multimillonario de 39 años fue atrapado en la pista del Aeropuerto de París-Le Bourget después de que su jet privado aterrizara desde Azerbaiyán.
Francia había emitido una orden de arresto contra Durov por complicidad en tráfico de drogas, delitos contra menores y fraude debido a la falta de moderación en Telegram y su incumplimiento en colaborar con las fuerzas del orden, informaron los medios TF1, LCI y BFMTV.
El canciller ruso Serguei Lavrov dijo este martes que su detención llevó a "las relaciones entre Moscú y París a su punto más bajo" y crítico "la posición que asume Francia en las cuestiones de libertad de expresión, la libertad de difusión de información y en general en temas de cumplimiento de profesión de periodista mucho antes de los acontecimientos actuales".
El canciller se refirió así a las limitaciones y cierre de actividades de cadenas rusas de noticias decididas en el pasado por el gobierno francés.
Por su parte, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó que si no hubiera pruebas "serias" contra Durov su detención en Francia sería claramente un "caso político".
"Las acusaciones son realmente muy graves y requieren igualmente pruebas serias, de lo contrario, será un intento directo de limitar la libertad de comunicación e, incluso se podría decir, de intimidar al jefe de una gran empresa", dijo Peskov. "Es decir, será exactamente una cuestión política, lo que ayer en esta historia fue desmentido por el señor Macron", sostuvo el portavoz del Kremlin.
Rusia está dispuesta a "ofrecer toda la ayuda y asistencia necesarias" a Pavel Durov, pero "la situación es complicada por el hecho de que también es ciudadano francés", explicó Peskov. El fundador de Telegram es franco-ruso y está afincado en Dubái desde hace algunos años.
"Esperamos que el señor Durov tenga todas las posibilidades necesarias para organizar su defensa jurídica", concluyó.
Por su parte, tal como dijo Peskov, el presidente francés Emmanuel Macron negó el lunes que la detención de Pavel Durov fuese "política" y dijo que "tuvo lugar en el marco de una investigación judicial en curso".
La detención de Durov desató una ola de críticas por considerarse que su arresto iba contra la libertad de expresión. Y muchas voces famosas pidieron su liberación, incluido Elon Musk, el dueño de X.
Macron criticó las "informaciones falsas sobre la detención de Pavel Durov en Francia" y aseguró que su país "está apegado a la libertad de expresión y de comunicación".
En tanto, Telegram se defendió de las acusaciones mediante un comunicado en el que aseguró que la compañía "cumple las leyes de la Unión Europea, incluida la Ley de Servicios Digitales" y que "es absurdo afirmar que una plataforma o su propietario son responsables de los abusos".
Telegram se posicionó como una alternativa a las plataformas de mensajería estadounidenses, criticadas por su explotación comercial de los datos personales de los usuarios. Además, desempeña un papel clave en el contexto de la ofensiva rusa en Ucrania, iniciada en febrero de 2022, y es utilizada activamente por políticos y observadores de ambos bandos.
Pero sus detractores la acusan de albergar contenidos a menudo ilegales, desde imágenes sexuales extremas a desinformación, pasando por servicios de compra de drogas.
"Washington está detrás del arresto de Durov. En vísperas de las elecciones presidenciales estadounidenses, es importante que Biden tome el control de Telegram", afirmó el presidente de la Duma, la Cámara de Diputados rusa, Viaceslav Volodin, sin aportar pruebas que respalden sus afirmaciones.
Aseguró también que "Telegram es una de las pocas plataformas de Internet, y la mayor, sobre la que Estados Unidos no tiene influencia" y que "opera en muchos países que le interesan".
"Para Washington, la vigilancia de las redes sociales, su total censura y subordinación, incluso mediante chantaje con el pretexto de la lucha contra diversos tipos de amenazas son métodos tradicionales de gestión política y de influencia externa", agregó Volodin.
El fundador y CEO de Telegram, Pavel Durov, fue detenido el sábado pasado en un aeropuerto de París por presuntamente permitir actividades criminales a través de su aplicación de mensajería cifrada, informaron medios franceses. El multimillonario de 39 años fue atrapado en la pista del Aeropuerto de París-Le Bourget después de que su jet privado aterrizara desde Azerbaiyán.
Francia había emitido una orden de arresto contra Durov por complicidad en tráfico de drogas, delitos contra menores y fraude debido a la falta de moderación en Telegram y su incumplimiento en colaborar con las fuerzas del orden, informaron los medios TF1, LCI y BFMTV.
El canciller ruso Serguei Lavrov dijo este martes que su detención llevó a "las relaciones entre Moscú y París a su punto más bajo" y crítico "la posición que asume Francia en las cuestiones de libertad de expresión, la libertad de difusión de información y en general en temas de cumplimiento de profesión de periodista mucho antes de los acontecimientos actuales".
El canciller se refirió así a las limitaciones y cierre de actividades de cadenas rusas de noticias decididas en el pasado por el gobierno francés.
Por su parte, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó que si no hubiera pruebas "serias" contra Durov su detención en Francia sería claramente un "caso político".
"Las acusaciones son realmente muy graves y requieren igualmente pruebas serias, de lo contrario, será un intento directo de limitar la libertad de comunicación e, incluso se podría decir, de intimidar al jefe de una gran empresa", dijo Peskov. "Es decir, será exactamente una cuestión política, lo que ayer en esta historia fue desmentido por el señor Macron", sostuvo el portavoz del Kremlin.
Rusia está dispuesta a "ofrecer toda la ayuda y asistencia necesarias" a Pavel Durov, pero "la situación es complicada por el hecho de que también es ciudadano francés", explicó Peskov. El fundador de Telegram es franco-ruso y está afincado en Dubái desde hace algunos años.
"Esperamos que el señor Durov tenga todas las posibilidades necesarias para organizar su defensa jurídica", concluyó.
Por su parte, tal como dijo Peskov, el presidente francés Emmanuel Macron negó el lunes que la detención de Pavel Durov fuese "política" y dijo que "tuvo lugar en el marco de una investigación judicial en curso".
La detención de Durov desató una ola de críticas por considerarse que su arresto iba contra la libertad de expresión. Y muchas voces famosas pidieron su liberación, incluido Elon Musk, el dueño de X.
Macron criticó las "informaciones falsas sobre la detención de Pavel Durov en Francia" y aseguró que su país "está apegado a la libertad de expresión y de comunicación".
En tanto, Telegram se defendió de las acusaciones mediante un comunicado en el que aseguró que la compañía "cumple las leyes de la Unión Europea, incluida la Ley de Servicios Digitales" y que "es absurdo afirmar que una plataforma o su propietario son responsables de los abusos".
Telegram se posicionó como una alternativa a las plataformas de mensajería estadounidenses, criticadas por su explotación comercial de los datos personales de los usuarios. Además, desempeña un papel clave en el contexto de la ofensiva rusa en Ucrania, iniciada en febrero de 2022, y es utilizada activamente por políticos y observadores de ambos bandos.
Pero sus detractores la acusan de albergar contenidos a menudo ilegales, desde imágenes sexuales extremas a desinformación, pasando por servicios de compra de drogas.
Con información de
Clarín