Maduro terminó su campaña volviendo contra Milei: "¿Quieren que Venezuela se convierta en Argentina?"
Viernes 26 de
Julio 2024
"Habrá paz. Antes, durante y después del 28 de julio. Lo garantizo. Soy el líder de la unión cívico-militar-policial y lo garantizo”, prometió el mandatario que irá por su segunda reelección. Pero al mismo tiempo amenazó con "mano de hierro y justicia a los fascistas y violentos".
Atres días de las elecciones presidenciales en Venezuela, Nicolás Maduro cerró su campaña con duras palabras hacia la oposición, asegurando que “habrá mano de hierro y justicia a los fascistas, violentos y racistas”. También apuntó contra el mandatario argentino, interrogando al electorado: “¿Ustedes quieren que venga un gobierno arrastrado a los gringos? ¿Quieren que Venezuela se convierta en Argentina? ¿Quieren que llegue un Milei?”.
"Habrá paz. Antes, durante y después del 28 de julio. Lo garantizo. Soy el líder de la unión cívico-militar-policial y lo garantizo. El 29 de julio tengo el decreto listo, porque ese día amanezco convocando a un gran diálogo nacional, económico, social, cultural y político a toda la sociedad venezolana, sin interferencia extranjera. No quiero que nadie se meta con Venezuela", enfatizó el mandatario que irá por su segunda reelección.
La referencia a unas elecciones pacíficas llegó luego de un escándalo desatado la semana pasada, cuando Maduro pidió: “El 28 de julio, si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito, la más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo". En ese sentido, este jueves el presidente dijo que el resultado de las elecciones definirá si en Venezuela “habrá patria” o se convertirá en una nueva “colonia”, y si “habrá paz o se acabará la tranquilidad”.
“Piensen bien, por su familia, por su emprendimiento, por su comercio, por su empresa, por su trabajo, ¿quién de los 10 candidatos garantiza la paz y la estabilidad de Venezuela?”, insistió Maduro. “Estoy preparado para una gran victoria y sé que nuestro pueblo lo va a volver hacer. No pudieron con nosotros y no podrán jamás y el domingo se lo demostraremos a los fascistas, al imperialismo”, agregó.
"¡Otra vez en las calles, de punta a punta!", celebró el mandatario ante la multitud en la emblemática Avenida Bolívar desbordada. "¡Pueblo en la calle diciendo: victoria, victoria popular!". "Hemos constituido una nueva mayoría política, social, cultural que se va a expresar con una contundente mayoría electoral el próximo domingo 28 de julio, porque no solo hemos unido al chavismo, estamos unidos todos y todas sin una sola fisura, un solo bloque de fuerza", describió.
Maduro acusa a la oposición de planear desconocer los resultados para poner en marcha actos de violencia. El aspirante a la reelección ha declarado además que las fuerzas armadas, que asegura que le son leales, podrían alzarse contra un eventual gobierno opositor. "Ellos ya están cantando fraude. No les vamos a permitir que sigan haciendo daño, se les acabó el tiempo. Si se comen la luz se van a arrepentir por 200 años”, amenazó.
“Será el último error que cometan en su vida política. Habrá mano de hierro y justicia a los fascistas, violentos y racistas. No vamos a permitir el odio ni la guarimba (protestas violentas). En Venezuela triunfará el amor, la convivencia, la armonía, la unión nacional y la paz", sostuvo. El acto fue en Maracaibo, capital del estado petrolero Zulia, donde el "gallo pinto", como se autodenominó el presidente, mostró el sable del prócer Simón Bolívar.
"Ustedes son mi ejemplo y han sido mi inspiración para enfrentar todo", le dijo el presidente a sus seguidores y confesó sentirse "muy emocionado y muy contento" por haber llenado "de punta a punta" varias avenidas de la ciudad, en el marco de su "peregrinación" por el país. Maduro, en el poder desde 2013, aspira a un tercer mandato de seis años en las elecciones de este fin de semana. Su principal rival es Edmundo González Urrutia, que aparece favorito en las encuestas y cuenta con el apoyo de la líder opositora inhabilitada, María Corina Machado.
Maduro cruzó a Javier Milei en su discurso de cierre de campaña
En su alocución de este jueves, Maduro interpeló al electorado: "¿Ustedes quieren que venga un gobierno arrastrado a los gringos? ¿Quieren que Venezuela se convierta en Argentina? ¿Quieren que llegue un Milei? Milei entregó las Islas Malvinas y el territorio del Atlántico Sur para una base militar gringa. ¿Ustedes quieren que la patria de Bolívar se llene de bases militares para la guerra? ¿Quieren que venga un presidente títere, monigote de los gringos? Eso jamás va a ocurrir, porque el domingo nosotros venceremos", aseguró.
Durante un acto de campaña el pasado domingo, Maduro ya había cuestionado duramente a Javier Milei, a quien acusó de ser un "malparido nazi fascista". “Yo en estos días dije y él se puso bravo, pero yo dije la verdad, ese Milei es un malparido nazi fascista, es un malparido que le está pasando la motosierra a los trabajadores, a las trabajadoras, (...) entonces él se puso bravo, (...) pero la verdad es la verdad”, expresó el mandatario.
Además, de cara a los comicios, el presidente les preguntó a sus seguidores si querían que "pase en Venezuela lo que está pasando en Argentina” y que el país caribeño “se convierta en el desastre social de la Argentina de Milei”, ante lo que los asistentes respondieron con un “no”. El Gobierno argentino respondió a través del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien acusó a Maduro de “dictador” e “imbécil”.
"Habrá paz. Antes, durante y después del 28 de julio. Lo garantizo. Soy el líder de la unión cívico-militar-policial y lo garantizo. El 29 de julio tengo el decreto listo, porque ese día amanezco convocando a un gran diálogo nacional, económico, social, cultural y político a toda la sociedad venezolana, sin interferencia extranjera. No quiero que nadie se meta con Venezuela", enfatizó el mandatario que irá por su segunda reelección.
La referencia a unas elecciones pacíficas llegó luego de un escándalo desatado la semana pasada, cuando Maduro pidió: “El 28 de julio, si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito, la más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo". En ese sentido, este jueves el presidente dijo que el resultado de las elecciones definirá si en Venezuela “habrá patria” o se convertirá en una nueva “colonia”, y si “habrá paz o se acabará la tranquilidad”.
“Piensen bien, por su familia, por su emprendimiento, por su comercio, por su empresa, por su trabajo, ¿quién de los 10 candidatos garantiza la paz y la estabilidad de Venezuela?”, insistió Maduro. “Estoy preparado para una gran victoria y sé que nuestro pueblo lo va a volver hacer. No pudieron con nosotros y no podrán jamás y el domingo se lo demostraremos a los fascistas, al imperialismo”, agregó.
"¡Otra vez en las calles, de punta a punta!", celebró el mandatario ante la multitud en la emblemática Avenida Bolívar desbordada. "¡Pueblo en la calle diciendo: victoria, victoria popular!". "Hemos constituido una nueva mayoría política, social, cultural que se va a expresar con una contundente mayoría electoral el próximo domingo 28 de julio, porque no solo hemos unido al chavismo, estamos unidos todos y todas sin una sola fisura, un solo bloque de fuerza", describió.
Maduro acusa a la oposición de planear desconocer los resultados para poner en marcha actos de violencia. El aspirante a la reelección ha declarado además que las fuerzas armadas, que asegura que le son leales, podrían alzarse contra un eventual gobierno opositor. "Ellos ya están cantando fraude. No les vamos a permitir que sigan haciendo daño, se les acabó el tiempo. Si se comen la luz se van a arrepentir por 200 años”, amenazó.
“Será el último error que cometan en su vida política. Habrá mano de hierro y justicia a los fascistas, violentos y racistas. No vamos a permitir el odio ni la guarimba (protestas violentas). En Venezuela triunfará el amor, la convivencia, la armonía, la unión nacional y la paz", sostuvo. El acto fue en Maracaibo, capital del estado petrolero Zulia, donde el "gallo pinto", como se autodenominó el presidente, mostró el sable del prócer Simón Bolívar.
"Ustedes son mi ejemplo y han sido mi inspiración para enfrentar todo", le dijo el presidente a sus seguidores y confesó sentirse "muy emocionado y muy contento" por haber llenado "de punta a punta" varias avenidas de la ciudad, en el marco de su "peregrinación" por el país. Maduro, en el poder desde 2013, aspira a un tercer mandato de seis años en las elecciones de este fin de semana. Su principal rival es Edmundo González Urrutia, que aparece favorito en las encuestas y cuenta con el apoyo de la líder opositora inhabilitada, María Corina Machado.
Maduro cruzó a Javier Milei en su discurso de cierre de campaña
En su alocución de este jueves, Maduro interpeló al electorado: "¿Ustedes quieren que venga un gobierno arrastrado a los gringos? ¿Quieren que Venezuela se convierta en Argentina? ¿Quieren que llegue un Milei? Milei entregó las Islas Malvinas y el territorio del Atlántico Sur para una base militar gringa. ¿Ustedes quieren que la patria de Bolívar se llene de bases militares para la guerra? ¿Quieren que venga un presidente títere, monigote de los gringos? Eso jamás va a ocurrir, porque el domingo nosotros venceremos", aseguró.
Durante un acto de campaña el pasado domingo, Maduro ya había cuestionado duramente a Javier Milei, a quien acusó de ser un "malparido nazi fascista". “Yo en estos días dije y él se puso bravo, pero yo dije la verdad, ese Milei es un malparido nazi fascista, es un malparido que le está pasando la motosierra a los trabajadores, a las trabajadoras, (...) entonces él se puso bravo, (...) pero la verdad es la verdad”, expresó el mandatario.
Además, de cara a los comicios, el presidente les preguntó a sus seguidores si querían que "pase en Venezuela lo que está pasando en Argentina” y que el país caribeño “se convierta en el desastre social de la Argentina de Milei”, ante lo que los asistentes respondieron con un “no”. El Gobierno argentino respondió a través del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien acusó a Maduro de “dictador” e “imbécil”.
Con información de
Perfil
