Fuerte crítica de Lacalle Pou y Lula por la ausencia de Milei en el Mercosur: "Acá deberíamos estar todos"
Martes 09 de
Julio 2024
El líder del PT posó sonriente con Mondino y el ministro Vieira. Pero dijo que fue una "tontería" que no fuera. Los presidentes de Uruguay y Brasil hablaron ante sus colegas de Bolivia y Paraguay en el plenario de jefes de Estado. Milei pegó un faltazo por sus diferencias con el brasileño.
"Acá deberíamos estar todos los presidentes", disparó este lunes el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, al hablar en la Cumbre del Mercosur, en Asunción. Lo hizo en clara alusión al faltazo que dio Javier Milei a este compromiso del país con el bloque regional.
Por su parte, Lula habló sobre el final de la Cumbre y dijo: "Es una enorme tontería que el presidente de un país importante como Argentina no participe en una reunión con el Mercosur". igualmente, agregó que "lo que importa es que el pueblo argentino participe en el Mercosur".
Aunque el Gobierno quiere disimular el impacto del faltazo de Milei molestó a todos los presidentes. Y es algo inédito. "No solo importa el mensaje, es muy importante el mensajero", dijo por cierto el uruguayo ante sus colegas, Luis Inacio Lula da Silva, de Brasil, y el anfitrión Santiago Peña, quien también hizo referencias a Milei pero más suaves.
"No pude conseguir que viniera el presidente Milei", dijo más temprano Peña, aunque afirmó que era "respetuoso" de los distintos procesos.
Antes, Lula esperó su turno y en su discurso, sin nombrarlo, quedó claro que hablaba de Milei. Primero dijo que no tenia sentido recurrir a un "nacionalismo arcaico y aislacionista" y tampoco revivir "las experiencias ultraliberales que sólo empeoraron las desigualdades en nuestra región".
Aún así, Lula no nombró a Milei y tuvo un fuerte gesto con la canciller Mondino en el almuerzo de presidentes y ministros de relaciones exteriores que se realizó pasado el mediodía. Como se ve en la foto que publica Clarín, el presidente de Brasil posó especialmente con la ministra argentina y su canciller Mauro Vieira. Mondino, Vieira y el embajador de Lula en Buenos Aires, Julio Bitelli, son quienes mantuvieron abiertos los canales de comunicación a lo largo de estos meses de tensión.
Con los únicos presidentes que Javier Milei se lleva en la región, aunque de manera distante, son Peña y Lacalle Pou.
Milei, que viajará en las próximas horas a Tucumán para el Pacto de Mayo, optó por irse el sábado a la ciudad de Camboriú, en Brasil, a participar de una conferencia de conservadores que organizaron el ex presidente Jair Bolsonaro y su hijo Eduardo, enemigos políticos de Lula da Silva.
Aunque el Presidente no hizo alusiones el domingo a Lula y evitó escalar en el enfrentamiento que amenaza derivar con un cortocircuito diplomático, días atrás llamó al mandatario brasileño "zurdito", "comunista" y "corrupto", entre otros calificativos. Aún así defendió en el escenario a su amigo Bolsonaro padre, sobre quien -dijo- se había montado en Brasil una "persecución judicial"
"La alteración del orden institucional no importa contra quién sea, si es electo democráticamente. No podemos tener visiones sesgadas según ese gobierno sea más o menos afín a nuestro pensamiento. Si la valoración de la democracia es subjetiva, ya no es tal. Ante el levantamiento y la amenaza, Uruguay no puede hacer otra cosa que solidarizarse", expresó Lacalle Pou este lunes.
En lo que hace a la firma de documentos, Argentina llevó al Mercosur este lunes con la canciller Diana Mondino, representando a Milei, una postura conservadora como la que tuvo en la asamblea general de la OEA. Cuestionó compromisos sobre la diversidad de género y el medioambiente, pero por la manera en que estaban redactados. Tampoco quiso meter en este documento cuestiones sobre el embargo a Cuba, y peleó hasta último momento de qué manera se inscribía una defensa a la democracia ante el levantamiento militar en Bolivia, que Milei llamó "autogolpe" del presidente Luis Arce. Sobre el final de la cumbre hubo consenso.
Lula, en cambio hizo muchas alusiones al oscuro levantamiento contra Arce. Más aún, dijo que "la reacción unánime al 26 de junio en Bolivia y al 8 de enero en Brasil (de 2023, siete días después de asumir él los bolsonaristas asaltaron las instituciones democráticas) demuestran que no hay atajos a la democracia en nuestra región". Lula también se refirió a la necesidad de aprobar un "Acuerdo de Libre Comercio con Palestina" y lamentó "que el pueblo palestino sufre las consecuencias de una guerra totalmente irracional". Y dijo que querían una una solución al conflicto entre Rusia y Ucrania "que involucre efectivamente a las dos partes". Son estas todas diferencias con el gobierno de Milei.
Qué dijo la Canciller
Mondino, que representó a Milei, dijo en su discurso: "Tenemos que demostrar que estamos abiertos a las negociaciones", con terceros países, es decir abrir el bloque pero no fue tan explicita como Lula a hablar de que eso incluya también un acuerdo de comercio con China, como lo dijo Lula.
Pero Mondino hizo llamado a cambiar el sistema de negociación, "hacerlo más rápido" o, a su vez, buscar "formas novedosas". Señaló: "dejemos de ser un Mercosur chiquito, miedoso, protegido, anquilosado, y empecemos a trabajar una hoja de ruta que nos permita combatir la pobreza, generando riqueza".
Por su parte, Lula habló sobre el final de la Cumbre y dijo: "Es una enorme tontería que el presidente de un país importante como Argentina no participe en una reunión con el Mercosur". igualmente, agregó que "lo que importa es que el pueblo argentino participe en el Mercosur".
Aunque el Gobierno quiere disimular el impacto del faltazo de Milei molestó a todos los presidentes. Y es algo inédito. "No solo importa el mensaje, es muy importante el mensajero", dijo por cierto el uruguayo ante sus colegas, Luis Inacio Lula da Silva, de Brasil, y el anfitrión Santiago Peña, quien también hizo referencias a Milei pero más suaves.
"No pude conseguir que viniera el presidente Milei", dijo más temprano Peña, aunque afirmó que era "respetuoso" de los distintos procesos.
Antes, Lula esperó su turno y en su discurso, sin nombrarlo, quedó claro que hablaba de Milei. Primero dijo que no tenia sentido recurrir a un "nacionalismo arcaico y aislacionista" y tampoco revivir "las experiencias ultraliberales que sólo empeoraron las desigualdades en nuestra región".
Aún así, Lula no nombró a Milei y tuvo un fuerte gesto con la canciller Mondino en el almuerzo de presidentes y ministros de relaciones exteriores que se realizó pasado el mediodía. Como se ve en la foto que publica Clarín, el presidente de Brasil posó especialmente con la ministra argentina y su canciller Mauro Vieira. Mondino, Vieira y el embajador de Lula en Buenos Aires, Julio Bitelli, son quienes mantuvieron abiertos los canales de comunicación a lo largo de estos meses de tensión.
Con los únicos presidentes que Javier Milei se lleva en la región, aunque de manera distante, son Peña y Lacalle Pou.
Milei, que viajará en las próximas horas a Tucumán para el Pacto de Mayo, optó por irse el sábado a la ciudad de Camboriú, en Brasil, a participar de una conferencia de conservadores que organizaron el ex presidente Jair Bolsonaro y su hijo Eduardo, enemigos políticos de Lula da Silva.
Aunque el Presidente no hizo alusiones el domingo a Lula y evitó escalar en el enfrentamiento que amenaza derivar con un cortocircuito diplomático, días atrás llamó al mandatario brasileño "zurdito", "comunista" y "corrupto", entre otros calificativos. Aún así defendió en el escenario a su amigo Bolsonaro padre, sobre quien -dijo- se había montado en Brasil una "persecución judicial"
"La alteración del orden institucional no importa contra quién sea, si es electo democráticamente. No podemos tener visiones sesgadas según ese gobierno sea más o menos afín a nuestro pensamiento. Si la valoración de la democracia es subjetiva, ya no es tal. Ante el levantamiento y la amenaza, Uruguay no puede hacer otra cosa que solidarizarse", expresó Lacalle Pou este lunes.
En lo que hace a la firma de documentos, Argentina llevó al Mercosur este lunes con la canciller Diana Mondino, representando a Milei, una postura conservadora como la que tuvo en la asamblea general de la OEA. Cuestionó compromisos sobre la diversidad de género y el medioambiente, pero por la manera en que estaban redactados. Tampoco quiso meter en este documento cuestiones sobre el embargo a Cuba, y peleó hasta último momento de qué manera se inscribía una defensa a la democracia ante el levantamiento militar en Bolivia, que Milei llamó "autogolpe" del presidente Luis Arce. Sobre el final de la cumbre hubo consenso.
Lula, en cambio hizo muchas alusiones al oscuro levantamiento contra Arce. Más aún, dijo que "la reacción unánime al 26 de junio en Bolivia y al 8 de enero en Brasil (de 2023, siete días después de asumir él los bolsonaristas asaltaron las instituciones democráticas) demuestran que no hay atajos a la democracia en nuestra región". Lula también se refirió a la necesidad de aprobar un "Acuerdo de Libre Comercio con Palestina" y lamentó "que el pueblo palestino sufre las consecuencias de una guerra totalmente irracional". Y dijo que querían una una solución al conflicto entre Rusia y Ucrania "que involucre efectivamente a las dos partes". Son estas todas diferencias con el gobierno de Milei.
Qué dijo la Canciller
Mondino, que representó a Milei, dijo en su discurso: "Tenemos que demostrar que estamos abiertos a las negociaciones", con terceros países, es decir abrir el bloque pero no fue tan explicita como Lula a hablar de que eso incluya también un acuerdo de comercio con China, como lo dijo Lula.
Pero Mondino hizo llamado a cambiar el sistema de negociación, "hacerlo más rápido" o, a su vez, buscar "formas novedosas". Señaló: "dejemos de ser un Mercosur chiquito, miedoso, protegido, anquilosado, y empecemos a trabajar una hoja de ruta que nos permita combatir la pobreza, generando riqueza".
Con información de
Clarín