Alerta por el real brasileño que no para de devaluarse: ¿en qué medida presiona al dólar en Argentina?
Lunes 01 de
Julio 2024
Desde la creación del real, la cotización ha subido más del 500%, llegando el pasado viernes (28) a R$ 5,657 en la venta. Si el tipo de cambio hubiera seguido la inflación de estos 30 años, según Folha, un dólar valdría R$ 3,81, lo que significa que la moneda brasileña sufrió una depreciación real del 42,78%.
El sondeo, que capta la percepción del mercado sobre los indicadores económicos, mostró que la estimación para el aumento de precios subió por octava semana consecutiva, desde el 3,98% de la semana anterior. Para 2025 también hubo un aumento de 0,02 puntos porcentuales, al 3,9%, mientras que para los dos años siguientes la estimación sigue respectivamente en 3,6% y 3,5%.
El objetivo central para la inflación es del 3%, siempre con un margen de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales hacia arriba o hacia abajo.
Real vs. dólar y un problema para la Argentina
La encuesta semanal que engloba la opinión de unos cien economistas también mostró una mayor depreciación del real, con el dólar calculado en 5,20 y 5,19 reales en 2024 y 2025, desde 5,15 reales en ambos casos la semana anterior.
El viernes pasado, el dólar volvió a dispararse y llegó a cotizarse a 5,60 reales durante la sesión, cerrando el día con un alza del 1,50%, a 5,5907 reales en la venta, el mayor valor de cierre desde el 10 de enero de 2022. Este lunes 1 de julio la divisa brasileña se sostiene en esos niveles, por lo que surge otro frente de preocupación para la Argentina, pues sumado a una Reserva Federal que continúa fortaleciendo el dólar y un precio para la soja poco conveniente, el frente internacional no luce muy optimista.
Con relación a la política monetaria, los especialistas siguen viendo la tasa básica de interés Selic cerrar 2024 en el nivel actual de 10,5%, bajando al 9,5% el próximo año. Para el Producto Bruto Interno (PBI), la estimación de crecimiento se mantuvo en 2,9% este año, pero cayó al 2% el próximo año.
El real cumple 30 años de existencia este lunes (1°), siendo considerado uno de los planes económicos más exitosos de la historia, aunque, comparado con el escenario actual, la moneda en sí ha perdido mucho de su poder adquisitivo, depreciándose más del 40% desde su implementación.
¿Qué pasa con el real?
Según datos de la prensa brasileña, en 1999, Brasil abandonó la paridad con el dólar, y el resultado fue una fuerte depreciación de la moneda del gigante sudamericano. En poco tiempo, la cotización ya era de R$ 2 por cada dólar, alcanzando más de R$ 4 durante las elecciones de 2002, con Lula da Silva a la cabeza en la carrera.
Desde la creación del real, la cotización ha subido más del 500%, llegando el pasado viernes (28) a R$ 5,657 en la venta. Si el tipo de cambio hubiera seguido la inflación de estos 30 años, según Folha, un dólar valdría R$ 3,81, lo que significa que la moneda brasileña sufrió una depreciación real del 42,78%.
A pesar de la fuerte pérdida de poder adquisitivo que el real ha tenido desde su creación, los especialistas son prácticamente unánimes en defender la importancia que tuvo el plan en sacar al país de la hiperinflación y en la mejora económica de estos últimos 30 años.
¿Cuál es el impacto en la Argentina?
Y es que, como bien explica a Ámbito el analista y operador de corredores de cambio, Gustavo Quintana, el real exhibe un proceso de caída frente al dólar por complicaciones de la economía brasileña.
Sin embargo, para el experto por el efecto cepo, "existe cierta inmunidad frente a lo que pase con otras monedas regionales". Esto, según explica Quintana, porque las restricciones cambiarias aíslan a la Argentina de los movimientos bruscos de otras monedas regionales. "No veo por el momento que hay vasos comunicantes entre esas variables", concluye el analista.
Por su parte, Andrés Reschini, analista de F2 Soluciones Financieras, el TC USD/BRL lleva acumulado un +15,5% en lo que va del año vs. un 13% del peso argentino. Y como tal explica, "Brasil es nuestro principal socio comercial y comenzó a relajar la política monetaria", por lo que se enfrenta a cotizaciones de commodities agro bajas, al igual que Argentina.
Además, se esperan una política fiscal con mayor nivel de gasto. "El debilitamiento del real frente al peso puede generar mayor deterioro en la balanza comercial y por ende dificultar la acumulación de reservas en un momento en el que Argentina necesita recomponer la posición de reservas de BCRA", advierte Reschini que concluye, "por lo tanto, puede poner más presión sobre el tipo de cambio".
Para otros estrategas, cuanto más se devalúe el real, más presiona para que el peso también se deprecie. Si no, Argentina se volvería costosa para los brasileros: un socio estratégico para el país.
La devaluación del real acelera la ya de por sí marcada apreciación del peso, podría ir aumentando la expectativa de devaluación local que en los últimos días ha cobrado fuerza y en ese sentido podría demorar liquidación de divisas por parte del agro. Ese efecto reduciría oferta en el mercado del CCL que venía muy demandado por el dólar blend y por esa vía se generaría presión al alza.
Los analistas suelen explicar que, lo que hace la devaluación del real es afectar al TCR bilateral y también al TCRM. De esta manera, los productos que Brasil ofrece al mundo se vuelven más atractivos y compiten con los argentinos. Eso puede poner presión al peso que está sostenido por un alto nivel de restricciones y agrega algo de tensión en la brecha cambiaria.
El objetivo central para la inflación es del 3%, siempre con un margen de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales hacia arriba o hacia abajo.
Real vs. dólar y un problema para la Argentina
La encuesta semanal que engloba la opinión de unos cien economistas también mostró una mayor depreciación del real, con el dólar calculado en 5,20 y 5,19 reales en 2024 y 2025, desde 5,15 reales en ambos casos la semana anterior.
El viernes pasado, el dólar volvió a dispararse y llegó a cotizarse a 5,60 reales durante la sesión, cerrando el día con un alza del 1,50%, a 5,5907 reales en la venta, el mayor valor de cierre desde el 10 de enero de 2022. Este lunes 1 de julio la divisa brasileña se sostiene en esos niveles, por lo que surge otro frente de preocupación para la Argentina, pues sumado a una Reserva Federal que continúa fortaleciendo el dólar y un precio para la soja poco conveniente, el frente internacional no luce muy optimista.
Con relación a la política monetaria, los especialistas siguen viendo la tasa básica de interés Selic cerrar 2024 en el nivel actual de 10,5%, bajando al 9,5% el próximo año. Para el Producto Bruto Interno (PBI), la estimación de crecimiento se mantuvo en 2,9% este año, pero cayó al 2% el próximo año.
El real cumple 30 años de existencia este lunes (1°), siendo considerado uno de los planes económicos más exitosos de la historia, aunque, comparado con el escenario actual, la moneda en sí ha perdido mucho de su poder adquisitivo, depreciándose más del 40% desde su implementación.
¿Qué pasa con el real?
Según datos de la prensa brasileña, en 1999, Brasil abandonó la paridad con el dólar, y el resultado fue una fuerte depreciación de la moneda del gigante sudamericano. En poco tiempo, la cotización ya era de R$ 2 por cada dólar, alcanzando más de R$ 4 durante las elecciones de 2002, con Lula da Silva a la cabeza en la carrera.
Desde la creación del real, la cotización ha subido más del 500%, llegando el pasado viernes (28) a R$ 5,657 en la venta. Si el tipo de cambio hubiera seguido la inflación de estos 30 años, según Folha, un dólar valdría R$ 3,81, lo que significa que la moneda brasileña sufrió una depreciación real del 42,78%.
A pesar de la fuerte pérdida de poder adquisitivo que el real ha tenido desde su creación, los especialistas son prácticamente unánimes en defender la importancia que tuvo el plan en sacar al país de la hiperinflación y en la mejora económica de estos últimos 30 años.
¿Cuál es el impacto en la Argentina?
Y es que, como bien explica a Ámbito el analista y operador de corredores de cambio, Gustavo Quintana, el real exhibe un proceso de caída frente al dólar por complicaciones de la economía brasileña.
Sin embargo, para el experto por el efecto cepo, "existe cierta inmunidad frente a lo que pase con otras monedas regionales". Esto, según explica Quintana, porque las restricciones cambiarias aíslan a la Argentina de los movimientos bruscos de otras monedas regionales. "No veo por el momento que hay vasos comunicantes entre esas variables", concluye el analista.
Por su parte, Andrés Reschini, analista de F2 Soluciones Financieras, el TC USD/BRL lleva acumulado un +15,5% en lo que va del año vs. un 13% del peso argentino. Y como tal explica, "Brasil es nuestro principal socio comercial y comenzó a relajar la política monetaria", por lo que se enfrenta a cotizaciones de commodities agro bajas, al igual que Argentina.
Además, se esperan una política fiscal con mayor nivel de gasto. "El debilitamiento del real frente al peso puede generar mayor deterioro en la balanza comercial y por ende dificultar la acumulación de reservas en un momento en el que Argentina necesita recomponer la posición de reservas de BCRA", advierte Reschini que concluye, "por lo tanto, puede poner más presión sobre el tipo de cambio".
Para otros estrategas, cuanto más se devalúe el real, más presiona para que el peso también se deprecie. Si no, Argentina se volvería costosa para los brasileros: un socio estratégico para el país.
La devaluación del real acelera la ya de por sí marcada apreciación del peso, podría ir aumentando la expectativa de devaluación local que en los últimos días ha cobrado fuerza y en ese sentido podría demorar liquidación de divisas por parte del agro. Ese efecto reduciría oferta en el mercado del CCL que venía muy demandado por el dólar blend y por esa vía se generaría presión al alza.
Los analistas suelen explicar que, lo que hace la devaluación del real es afectar al TCR bilateral y también al TCRM. De esta manera, los productos que Brasil ofrece al mundo se vuelven más atractivos y compiten con los argentinos. Eso puede poner presión al peso que está sostenido por un alto nivel de restricciones y agrega algo de tensión en la brecha cambiaria.
Con información de
Ámbito
