La inflación natural de conflictos
El contagio de reclamos por un salario digno
Domingo 26 de
Mayo 2024
La provincia de Santa Fe "es una provincia grande que paga salarios de provincia chica", dijo Sergio Romero titular de la UDA, a varios medios (incluidos los de alcance nacional).
La situación de Misiones. La reacción de Quintela en La Rioja para aumentar salarios de estatales repentinamente y la latente explosión de conflictos jurisdiccionales es una percepción que analiza la política.
Santa Fe dio un punto más a la policía en el marco de acuerdos salariales muy bajos.
En la conferencia de prensa, desarrollada en la sede de la CGT, el martes 21 de mayo, con el objetivo de convocar al paro del 23 de mayo, participaron los sindicatos con alcance nacional de todos los niveles educativos (paritaria nacional y universitaria).
Algo quedó muy claro: es el momento de la defensa de la educación de gestión estatal. Es el tiempo de la defensa de la Universidad pública.
En este contexto desentonó el discurso de un sector docente que intenta equiparar la escuela privada con la escuela pública.
La escuela pública será y es la herramienta gratuita, laica y universal más importante de la Argentina. El ruido mencionado es connatural. La contradicción pública del mensaje. Cómo quienes defienden la proliferación de empresas educativas y gestión privada de la educación comparten escenario con quiénes combaten las políticas privatizadoras de la educación de Milei. En ese punto los sindicatos dan un mensaje confuso.
Por otro lado, en varias provincias las entidades gremiales docentes del Estado reciben cada vez más afiliados del ámbito privado en busca de una representación más potente.
La provincia de Santa Fe es un ejemplo de diferencias salariales marcadas. No es lo mismo ser un trabajador de API, del Poder Judicial (régimen salarial del Poder Judicial) o del Senado que desempeñarse como docente, policía, enfermera de hospital o asistente escolar. Ni hablar de la remuneración del cargo de un vicepresidente de Lotería o funcionario jerarquizado del Estado. O del titular de la EPE o de Aguas Santafesinas.
Ningún gobierno tuvo la valentía de equilibrar la balanza y la actual gestión de la casa gris continúa con el desalentador paradigma: los salarios bajos son siempre para los mismos sectores de trabajadores.
Santa Fe dio un punto más a la policía en el marco de acuerdos salariales muy bajos.
En la conferencia de prensa, desarrollada en la sede de la CGT, el martes 21 de mayo, con el objetivo de convocar al paro del 23 de mayo, participaron los sindicatos con alcance nacional de todos los niveles educativos (paritaria nacional y universitaria).
Algo quedó muy claro: es el momento de la defensa de la educación de gestión estatal. Es el tiempo de la defensa de la Universidad pública.
En este contexto desentonó el discurso de un sector docente que intenta equiparar la escuela privada con la escuela pública.
La escuela pública será y es la herramienta gratuita, laica y universal más importante de la Argentina. El ruido mencionado es connatural. La contradicción pública del mensaje. Cómo quienes defienden la proliferación de empresas educativas y gestión privada de la educación comparten escenario con quiénes combaten las políticas privatizadoras de la educación de Milei. En ese punto los sindicatos dan un mensaje confuso.
Por otro lado, en varias provincias las entidades gremiales docentes del Estado reciben cada vez más afiliados del ámbito privado en busca de una representación más potente.
La provincia de Santa Fe es un ejemplo de diferencias salariales marcadas. No es lo mismo ser un trabajador de API, del Poder Judicial (régimen salarial del Poder Judicial) o del Senado que desempeñarse como docente, policía, enfermera de hospital o asistente escolar. Ni hablar de la remuneración del cargo de un vicepresidente de Lotería o funcionario jerarquizado del Estado. O del titular de la EPE o de Aguas Santafesinas.
Ningún gobierno tuvo la valentía de equilibrar la balanza y la actual gestión de la casa gris continúa con el desalentador paradigma: los salarios bajos son siempre para los mismos sectores de trabajadores.