Guerra en Ucrania: Zelensky cancela sus viajes y repliega tropas ante el avance ruso en el nuevo frente
Miércoles 15 de
Mayo 2024
El presidente ucraniano se quedará en el país en medio de la compleja situación en la zona de Kharkiv; Putin celebró los avances de sus fuerzas “en todos los frentes”
KIEV.- El gobierno de Ucrania dio varias señales que dan cuenta de la compleja situación a la que se enfrentan sus tropas ante el avance de las fuerzas del Kremlin en la zona de Kharkiv, al norte del país, tras el asalto terrestre de los rusos lanzado el 10 de mayo.
El presidente Volodimir Zelensky canceló sus próximos viajes al extranjero, el ejército ucraniano dijo que tuvo que retirarse de algunas zonas del frente norte y el gobierno anunció el envío de refuerzos este miércoles.
“En algunas zonas, cerca de Lukiantsi y Vovchansk, en respuesta al fuego enemigo y a un asalto de infantería, nuestras unidades maniobraron en dirección de posiciones más favorables”, dijo el miércoles a la televisión el portavoz de las fuerzas ucranianas en la región, Nazar Voloshin, en referencia al repliegue.
“Se están desplegando fuerzas adicionales, y hay reservas disponibles”, dijo más tarde en Facebook el portavoz de Zelensky, Serguii Nikiforov, tras una reunión entre el mandatario y el comandante de las Fuerzas Armadas, Oleksandr Sirski.
En su video nocturno de cada día, Zelensky señaló el martes que el ejército ha enviado refuerzos a Kharkiv y Donetsk. “Es demasiado pronto para sacar conclusiones, pero la situación está bajo control”, afirmó.
“Las regiones de Donetsk y Kharkiv son donde las cosas son más difíciles en este momento”, dijo el mandatario, y afirmó que se necesita una “aceleración notable de las entregas” de armas occidentales.
Mientras tanto, el portavoz de Zelensky anunció la cancelación de los viajes internacionales del mandatario “que estaban previstos para los próximos días”, entre ellos uno a España este viernes. No se explicaron los motivos de su decisión, pero especialistas lo vincularon con el avance ruso.
En su parte de este miércoles, el ejército ruso aseguró que, al igual que este martes, logró avanzar “en profundidad entre las líneas de defensa enemigas”, y reivindicó la toma de esa localidad de Lukiantsi y la de Gliboke.
Rusia afirmó también haber tomado en el sur de Ucrania la localidad de Robotine, una de las pocas que el ejército de Kiev logró recuperar en agosto, en su contraofensiva del verano de 2023.
En esa línea, el presidente Vladimir Putin se felicitó este miércoles por el avance de las tropas rusas “en todos los frentes” del campo de batalla ucraniano. “Cada día, constantemente, nuestras tropas están mejorando sus posiciones en todos los frentes”, dijo Putin a los mandos militares del país, entre ellos el nuevo ministro de Defensa, Andrei Belousov, según imágenes televisadas.
Las fuerzas del Kremlin llevan a cabo una nueva ofensiva sobre la región nororiental de Kharkiv desde la semana pasada. Es la incursión transfronteriza más significativa desde el inicio de la guerra y ha obligado a cerca de 8000 residentes a abandonar sus hogares. Junto con el esfuerzo iniciado por Moscú hace varias semanas para consolidar sus recientes avances en Donetsk, una provincia del este del país, el conflicto, que dura ya más de dos años, ha entrado en una fase crítica para el mermado ejército local.
Rusia está abriendo nuevos frentes para tratar de llevar al límite al ejército rival, escaso de municiones y efectivos, a lo largo de los 1000 kilómetros del frente, con la esperanza de que sus defensas colapsen. La artillería rusa y sus incursiones de sabotaje han estado amenazando las provincias de Chernihiv y Sumy, en el norte.
Mientras tanto, el Instituto para el Estudio de la Guerra indicó este martes por la noche que el ritmo del avance ruso en la región fronteriza de Kharkiv se ha ralentizado después de avances significativos. El principal objetivo de Moscú en esa zona es crear una “zona de seguridad” que evitaría ataques transfronterizos ucranianos contra la región rusa de Belgorod, agregó el centro de estudios con sede en Washington.
Las autoridades ucranianas aseguran que la ciudad de Kharkiv no está amenazada por un asalto terrestre. Sin embargo ha sido objeto de bombardeos rusos durante semanas que han afectado en particular la red energética. El miércoles empezaron a levantarse en todo el país las restricciones al acceso a la electricidad por los daños infligidos a las infraestructuras por los ataques rusos de los últimos meses.
La visita de Blinken
Para contrarrestar los renovados ataques rusos, Zelensky instó el martes a los países occidentales a acelerar el suministro de armas tras una reunión con el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
El secretario de Estado norteamericano está en Kiev el martes y miércoles para tranquilizar al gobierno ucraniano sobre el apoyo de Estados Unidos, tras meses de incertidumbre, y dijo que Washington estará a su lado “hasta que la seguridad, la soberanía y la capacidad de Ucrania para elegir su propio camino estén garantizadas”.
“Ucrania ha tenido que adaptarse y ajustarse a esta situación y lo ha hecho de forma extraordinaria”, afirmó Blinken refiriéndose a las exportaciones de cereal, que ahora se realizan en tren luego de que las rutas tradicionales, principalmente por mar, quedasen interrumpidas tras la invasión a gran escala lanzada por Rusia el 24 de febrero de 2022.
El presidente Volodimir Zelensky canceló sus próximos viajes al extranjero, el ejército ucraniano dijo que tuvo que retirarse de algunas zonas del frente norte y el gobierno anunció el envío de refuerzos este miércoles.
“En algunas zonas, cerca de Lukiantsi y Vovchansk, en respuesta al fuego enemigo y a un asalto de infantería, nuestras unidades maniobraron en dirección de posiciones más favorables”, dijo el miércoles a la televisión el portavoz de las fuerzas ucranianas en la región, Nazar Voloshin, en referencia al repliegue.
“Se están desplegando fuerzas adicionales, y hay reservas disponibles”, dijo más tarde en Facebook el portavoz de Zelensky, Serguii Nikiforov, tras una reunión entre el mandatario y el comandante de las Fuerzas Armadas, Oleksandr Sirski.
En su video nocturno de cada día, Zelensky señaló el martes que el ejército ha enviado refuerzos a Kharkiv y Donetsk. “Es demasiado pronto para sacar conclusiones, pero la situación está bajo control”, afirmó.
“Las regiones de Donetsk y Kharkiv son donde las cosas son más difíciles en este momento”, dijo el mandatario, y afirmó que se necesita una “aceleración notable de las entregas” de armas occidentales.
Mientras tanto, el portavoz de Zelensky anunció la cancelación de los viajes internacionales del mandatario “que estaban previstos para los próximos días”, entre ellos uno a España este viernes. No se explicaron los motivos de su decisión, pero especialistas lo vincularon con el avance ruso.
En su parte de este miércoles, el ejército ruso aseguró que, al igual que este martes, logró avanzar “en profundidad entre las líneas de defensa enemigas”, y reivindicó la toma de esa localidad de Lukiantsi y la de Gliboke.
Rusia afirmó también haber tomado en el sur de Ucrania la localidad de Robotine, una de las pocas que el ejército de Kiev logró recuperar en agosto, en su contraofensiva del verano de 2023.
En esa línea, el presidente Vladimir Putin se felicitó este miércoles por el avance de las tropas rusas “en todos los frentes” del campo de batalla ucraniano. “Cada día, constantemente, nuestras tropas están mejorando sus posiciones en todos los frentes”, dijo Putin a los mandos militares del país, entre ellos el nuevo ministro de Defensa, Andrei Belousov, según imágenes televisadas.
Las fuerzas del Kremlin llevan a cabo una nueva ofensiva sobre la región nororiental de Kharkiv desde la semana pasada. Es la incursión transfronteriza más significativa desde el inicio de la guerra y ha obligado a cerca de 8000 residentes a abandonar sus hogares. Junto con el esfuerzo iniciado por Moscú hace varias semanas para consolidar sus recientes avances en Donetsk, una provincia del este del país, el conflicto, que dura ya más de dos años, ha entrado en una fase crítica para el mermado ejército local.
Rusia está abriendo nuevos frentes para tratar de llevar al límite al ejército rival, escaso de municiones y efectivos, a lo largo de los 1000 kilómetros del frente, con la esperanza de que sus defensas colapsen. La artillería rusa y sus incursiones de sabotaje han estado amenazando las provincias de Chernihiv y Sumy, en el norte.
Mientras tanto, el Instituto para el Estudio de la Guerra indicó este martes por la noche que el ritmo del avance ruso en la región fronteriza de Kharkiv se ha ralentizado después de avances significativos. El principal objetivo de Moscú en esa zona es crear una “zona de seguridad” que evitaría ataques transfronterizos ucranianos contra la región rusa de Belgorod, agregó el centro de estudios con sede en Washington.
Las autoridades ucranianas aseguran que la ciudad de Kharkiv no está amenazada por un asalto terrestre. Sin embargo ha sido objeto de bombardeos rusos durante semanas que han afectado en particular la red energética. El miércoles empezaron a levantarse en todo el país las restricciones al acceso a la electricidad por los daños infligidos a las infraestructuras por los ataques rusos de los últimos meses.
La visita de Blinken
Para contrarrestar los renovados ataques rusos, Zelensky instó el martes a los países occidentales a acelerar el suministro de armas tras una reunión con el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
El secretario de Estado norteamericano está en Kiev el martes y miércoles para tranquilizar al gobierno ucraniano sobre el apoyo de Estados Unidos, tras meses de incertidumbre, y dijo que Washington estará a su lado “hasta que la seguridad, la soberanía y la capacidad de Ucrania para elegir su propio camino estén garantizadas”.
“Ucrania ha tenido que adaptarse y ajustarse a esta situación y lo ha hecho de forma extraordinaria”, afirmó Blinken refiriéndose a las exportaciones de cereal, que ahora se realizan en tren luego de que las rutas tradicionales, principalmente por mar, quedasen interrumpidas tras la invasión a gran escala lanzada por Rusia el 24 de febrero de 2022.
Con información de
La Nación