Disputa política en España luego de que las playas del norte quedaran cubiertas de millones de bolitas de plástico
Jueves 11 de
Enero 2024
Cientos de voluntarios utilizan coladores o utensilios de sus casas para intentar recuperar millones de pequeñas esferas tóxicas para la fauna marina y el ser humano
Una enorme cantidad de pequeñas bolitas de plástico están inundando las costas del norte de España luego de que un contenedor cayera de un buque mercante el mes pasado, un grave accidente que llevó a las autoridades a declarar una emergencia ambiental.
Los pellets, como se llama a estas pequeñas bolitas blancas de unos 5 milímetros de diámetro, se amontonan desde hace días en las playas de la región de Galicia dese que cayeron al mar el 8 de diciembre seis contenedores de un barco de bandera de Liberia, que hacía ruta en los puertos de Algeciras, en España, y Róterdam, Holanda
Según el gigante danés del transporte marítimo Maersk, propietario de los contenedores, uno de ellos contenía bolsas de gránulos de plástico, usados principalmente para producir botellas.
En Galicia, la provincia más afectada, que todavía recuerda la marea negra provocada en 2002 por el hundimiento del petrolero Prestige, los voluntarios trabajan desde hace varios días con tamices o coladores para limpiar las playas de los millones de pellets.
“Estamos recogiendo los pellets con instrumentos de la casa que tenemos nosotros mismos”, explica Adriana Montoto, una farmacéutica de 35 años, que lamenta que sean las “ONG las que están organizando” la limpieza.
Las tareas de limpieza están organizadas por organizaciones como Ecologistas en Acción, que acusan de “inacción” a las autoridades regionales. Estas últimas anunciaron el lunes la movilización de 200 personas para ayudar a limpiar las playas.
Los gobiernos regionales de Galicia y Asturias le pidieron ayuda al gobierno central en Madrid, que respondió a la petición este jueves por carta, diciendo que facilitaría “todos los medios terrestres y marítimos necesarios para la limpieza si las vigilancias aéreas detectan el producto en el mar”, informó La Voz de Galicia.
“También se facilitará ese retén que demanda para actuar en tierra, pero no de activación tan inmediata como exige la Xunta, pues aconseja un preaviso de 12 horas para que puedan intervenir los operativos adscritos al Plan Estatal de Protección de la Ribera del Mar”, indicó el medio.
Las autoridades de la Xunta de Galicia temen que las pequeñas pelotitas puedan ser tóxicas y hay indicios de que se han encontrado también en las costas de Francia.
Las playas de los municipios de Vigo, Pontevedra, Muros, Noia, Ferrol y La Coruña son las más afectadas, pero también se han encontrado microplásticos en regiones vecinas.
“No sabemos todavía cuál es la magnitud de lo que puede ocurrir”, indicó el martes la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, a la radio Cadena Ser.
El lunes, fiscales estatales españoles abrieron una investigación.
“Estas bolistas se convierten en un problema medioambiental porque los peces las confunden con huevos y se las comen, el pez se envenena con estas bolitas y esto pasa a la cadena trófica y estos peces se convierten en pescado... y acaban en la mesa de nuestras casas”, dijo Cristóbal López, vocero del grupo español Ecologistas en Acción, desde una playa de Galicia.
El vertido fue reportado por primera vez a las autoridades el 13 de diciembre, cuando cientos de miles de esferas de plástico blanco comenzaron a aparecer en la costa atlántica española.
Según el gobierno de la Xunta de Galicia, el barco de carga Toconao, que navega bajo bandera de Liberia, perdió seis contenedores ante la costa de Portugal, a unos 80 kilómetros al oeste de Viana do Castelo, en la frontera con España.
Uno de los seis contenedores llevaba 1000 sacos de pellets, cada uno con 25 kilos de las diminutas esferas blancas que se utilizan para la fabricación de productos de plástico, indicó el representante del gobierno gallego.
Greenpeace y otras organizaciones medioambientales calculan que podrían haberse perdido millones de pellets. Estas piezas suponen un peligro para la vida marina y humana ya que pueden descomponerse en microplásticos que pueden llegar a comer los peces que más tarde capturan los pescadores, agregaron.
“La contaminación por plásticos en el mar y ecosistemas es uno de los grandes problemas que enfrenta la humanidad en este momento, y por lo tanto la liberación de un volumen tan importante como este (de plásticos) requiere un seguimiento y requiere ver si en origen tanto la naviera como la transportista tuvieron toda la cautela debida y si la gestión posterior ha sido la correcta”, declaró la ministra del Ambiente de España, Teresa Ribera.
La compañía Maersk dijo que está investigando la causa del hecho a fin de “tomar las medidas necesarias para minimizar el riesgo de que ocurran incidentes similares en el futuro”.
“Ninguno de los seis contenedores tenían productos peligrosos. Uno tenía sacos con pequeños pellets de plástico para la producción de empaques para comestibles, como botellas de agua”, dijo Maersk en un comunicado. “Los dueños del barco han designado varios especialistas para apoyar en la remoción de los pellets”.
Disputa política
Este vertido provocó una gran polémica política, a poco más de un mes de las elecciones en Galicia, región que es el bastión del líder de la oposición de derecha, Alberto Núñez Feijóo.
El gobierno de izquierda acusó a la región, que fue gobernada por muchos años por Feijóo y sigue en manos de su Partido Popular, de haber tardado demasiado en pedir ayuda estatal.
“No podemos permitir que la limpieza de las playas afectadas sea asumida por el maravilloso compromiso de los voluntarios y las organizaciones ecologistas”, detalló el Ministerio para la Transición Ecológica.
El partido de extrema izquierda Sumar, miembro de la coalición de gobierno del presidente socialista Pedro Sánchez, anunció el martes que presentará una denuncia por “inacción” contra las autoridades gallegas.
El gobierno gallego anunció recién este martes que elevará el nivel de alerta de contaminación al 2, lo que disparará el envío de ayuda por parte del Estado central.
”Lo que sí es tóxico” en este asunto “es la utilización política” que de él hace la izquierda, criticó Feijóo.
La Comisión Europea propuso en octubre pasado una serie de medidas para prevenir el mal manejo y pérdida de los pellets. Las medidas deben ser debatidas por los 27 miembros de la Unión Europea y por el Parlamento Europeo, y entrarían en vigencia 18 meses después de lograrse cualquier acuerdo.
Jordi Oliva, cofundador de Good Karma Projects, una ONG española dedicada al combate de los microplásticos en el mar, dijo que esta es la mayor cantidad de pellets jamás vista por el grupo en aguas españolas. Indicó que espera que el suceso lleve a las autoridades nacionales y de la UE a tomar acción.
Oliva señaló que los pellets actúan como esponjas que absorben las toxinas que ya están en el agua, con lo cual se convierten en píldoras tóxicas para cualquier criatura marina que las ingiera y que luego entre a la cadena alimenticia.
“Esto contribuye a la contaminación por microplásticos”, puntualizó Oliva. “Hay que poner el foco de la discusión, no tanto en quién lo recoge ni cómo actuamos ahora, porque puede que el mes que viene tengamos que volver a correr si no existe una regulación que nos garantice que este material se manipula con las precauciones”.
Los pellets, como se llama a estas pequeñas bolitas blancas de unos 5 milímetros de diámetro, se amontonan desde hace días en las playas de la región de Galicia dese que cayeron al mar el 8 de diciembre seis contenedores de un barco de bandera de Liberia, que hacía ruta en los puertos de Algeciras, en España, y Róterdam, Holanda
Según el gigante danés del transporte marítimo Maersk, propietario de los contenedores, uno de ellos contenía bolsas de gránulos de plástico, usados principalmente para producir botellas.
En Galicia, la provincia más afectada, que todavía recuerda la marea negra provocada en 2002 por el hundimiento del petrolero Prestige, los voluntarios trabajan desde hace varios días con tamices o coladores para limpiar las playas de los millones de pellets.
“Estamos recogiendo los pellets con instrumentos de la casa que tenemos nosotros mismos”, explica Adriana Montoto, una farmacéutica de 35 años, que lamenta que sean las “ONG las que están organizando” la limpieza.
Las tareas de limpieza están organizadas por organizaciones como Ecologistas en Acción, que acusan de “inacción” a las autoridades regionales. Estas últimas anunciaron el lunes la movilización de 200 personas para ayudar a limpiar las playas.
Los gobiernos regionales de Galicia y Asturias le pidieron ayuda al gobierno central en Madrid, que respondió a la petición este jueves por carta, diciendo que facilitaría “todos los medios terrestres y marítimos necesarios para la limpieza si las vigilancias aéreas detectan el producto en el mar”, informó La Voz de Galicia.
“También se facilitará ese retén que demanda para actuar en tierra, pero no de activación tan inmediata como exige la Xunta, pues aconseja un preaviso de 12 horas para que puedan intervenir los operativos adscritos al Plan Estatal de Protección de la Ribera del Mar”, indicó el medio.
Las autoridades de la Xunta de Galicia temen que las pequeñas pelotitas puedan ser tóxicas y hay indicios de que se han encontrado también en las costas de Francia.
Las playas de los municipios de Vigo, Pontevedra, Muros, Noia, Ferrol y La Coruña son las más afectadas, pero también se han encontrado microplásticos en regiones vecinas.
“No sabemos todavía cuál es la magnitud de lo que puede ocurrir”, indicó el martes la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, a la radio Cadena Ser.
El lunes, fiscales estatales españoles abrieron una investigación.
“Estas bolistas se convierten en un problema medioambiental porque los peces las confunden con huevos y se las comen, el pez se envenena con estas bolitas y esto pasa a la cadena trófica y estos peces se convierten en pescado... y acaban en la mesa de nuestras casas”, dijo Cristóbal López, vocero del grupo español Ecologistas en Acción, desde una playa de Galicia.
El vertido fue reportado por primera vez a las autoridades el 13 de diciembre, cuando cientos de miles de esferas de plástico blanco comenzaron a aparecer en la costa atlántica española.
Según el gobierno de la Xunta de Galicia, el barco de carga Toconao, que navega bajo bandera de Liberia, perdió seis contenedores ante la costa de Portugal, a unos 80 kilómetros al oeste de Viana do Castelo, en la frontera con España.
Uno de los seis contenedores llevaba 1000 sacos de pellets, cada uno con 25 kilos de las diminutas esferas blancas que se utilizan para la fabricación de productos de plástico, indicó el representante del gobierno gallego.
Greenpeace y otras organizaciones medioambientales calculan que podrían haberse perdido millones de pellets. Estas piezas suponen un peligro para la vida marina y humana ya que pueden descomponerse en microplásticos que pueden llegar a comer los peces que más tarde capturan los pescadores, agregaron.
“La contaminación por plásticos en el mar y ecosistemas es uno de los grandes problemas que enfrenta la humanidad en este momento, y por lo tanto la liberación de un volumen tan importante como este (de plásticos) requiere un seguimiento y requiere ver si en origen tanto la naviera como la transportista tuvieron toda la cautela debida y si la gestión posterior ha sido la correcta”, declaró la ministra del Ambiente de España, Teresa Ribera.
La compañía Maersk dijo que está investigando la causa del hecho a fin de “tomar las medidas necesarias para minimizar el riesgo de que ocurran incidentes similares en el futuro”.
“Ninguno de los seis contenedores tenían productos peligrosos. Uno tenía sacos con pequeños pellets de plástico para la producción de empaques para comestibles, como botellas de agua”, dijo Maersk en un comunicado. “Los dueños del barco han designado varios especialistas para apoyar en la remoción de los pellets”.
Disputa política
Este vertido provocó una gran polémica política, a poco más de un mes de las elecciones en Galicia, región que es el bastión del líder de la oposición de derecha, Alberto Núñez Feijóo.
El gobierno de izquierda acusó a la región, que fue gobernada por muchos años por Feijóo y sigue en manos de su Partido Popular, de haber tardado demasiado en pedir ayuda estatal.
“No podemos permitir que la limpieza de las playas afectadas sea asumida por el maravilloso compromiso de los voluntarios y las organizaciones ecologistas”, detalló el Ministerio para la Transición Ecológica.
El partido de extrema izquierda Sumar, miembro de la coalición de gobierno del presidente socialista Pedro Sánchez, anunció el martes que presentará una denuncia por “inacción” contra las autoridades gallegas.
El gobierno gallego anunció recién este martes que elevará el nivel de alerta de contaminación al 2, lo que disparará el envío de ayuda por parte del Estado central.
”Lo que sí es tóxico” en este asunto “es la utilización política” que de él hace la izquierda, criticó Feijóo.
La Comisión Europea propuso en octubre pasado una serie de medidas para prevenir el mal manejo y pérdida de los pellets. Las medidas deben ser debatidas por los 27 miembros de la Unión Europea y por el Parlamento Europeo, y entrarían en vigencia 18 meses después de lograrse cualquier acuerdo.
Jordi Oliva, cofundador de Good Karma Projects, una ONG española dedicada al combate de los microplásticos en el mar, dijo que esta es la mayor cantidad de pellets jamás vista por el grupo en aguas españolas. Indicó que espera que el suceso lleve a las autoridades nacionales y de la UE a tomar acción.
Oliva señaló que los pellets actúan como esponjas que absorben las toxinas que ya están en el agua, con lo cual se convierten en píldoras tóxicas para cualquier criatura marina que las ingiera y que luego entre a la cadena alimenticia.
“Esto contribuye a la contaminación por microplásticos”, puntualizó Oliva. “Hay que poner el foco de la discusión, no tanto en quién lo recoge ni cómo actuamos ahora, porque puede que el mes que viene tengamos que volver a correr si no existe una regulación que nos garantice que este material se manipula con las precauciones”.
Con información de
AP y AFP