Joe Biden y Xi Jinping se reunirán el miércoles que viene en Estados Unidos después de un año de tensión entre las dos superpotencias
Viernes 10 de
Noviembre 2023
El encuentro, que se celebrará en los márgenes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), podría durar horas y en él participarán equipos de funcionarios de ambos países
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá cara a cara con su par chino, Xi Jinping, por primera vez en un año el miércoles 15 de noviembre, según altos funcionarios estadounidenses, una gestión diplomática de alto riesgo destinada a frenar las tensiones entre las dos superpotencias mundiales.
El encuentro, que se celebrará en los márgenes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en la bahía de San Francisco, podría durar horas y en él participarán equipos de funcionarios de Pekín y Washington.
Se espera que se traten temas globales como la guerra entre Israel y Hamas, la invasión rusa de Ucrania, los lazos de Corea del Norte con Rusia, Taiwán, el Indo-Pacífico, los derechos humanos, el fentanilo, la inteligencia artificial, así como el comercio “justo” y las relaciones económicas, expresaron los funcionarios.
“No se ocultará nada; todo está sobre la mesa”, indicó a la prensa un alto funcionario de la administración Biden que no quiso ser citado.
“Tenemos las cosas claras. Sabemos que los esfuerzos por moldear o reformar China a lo largo de varias décadas han fracasado. No obstante, esperamos que China esté presente y sea un actor importante en la escena mundial durante el resto de nuestras vidas”, agregó.
Las autoridades estadounidenses, que llevan casi un año presionando para que se celebre la reunión, creen que Pekín ha estado trabajando de forma activa para socavar la política estadounidense en todo el mundo. Sin embargo, funcionarios de la Casa Blanca han insistido en que desean una “rivalidad” con China, pero no un “conflicto” ni una “Guerra Fría”.
Biden y Xi se reunieron por última vez hace casi un año en los márgenes de la Cumbre del G20 en Bali, Indonesia. En la reunión de casi tres horas, el presidente norteamericano objetó directamente las “acciones coercitivas y cada vez más agresivas” de China hacia Taiwán y discutió la invasión de Ucrania por parte de Rusia, entre otros temas. Por su parte, el mandatario chino enfatizó que “la cuestión de Taiwán está en el núcleo mismo de los intereses fundamentales de China y que es la primera línea roja que no debe cruzarse en las relaciones entre China y Estados Unidos”.
2024, un año clave
La reunión de la próxima semana se produce mientras Washington se prepara para otro año potencialmente complicado en las relaciones con Pekín, ya que Taiwán tiene previsto celebrar elecciones presidenciales en enero y Estados Unidos en noviembre.
Pekín considera que el contacto oficial estadounidense con Taiwán es un estímulo suficiente para hacer permanente la independencia de facto de la isla, algo que los líderes norteamericanos dicen que no respaldan. Aunque Estados Unidos ha mantenido que Taipéi es un socio importante en el Indo-Pacífico, Biden tiene la intención de reafirmar que Estados Unidos no desea un cambio en el statu quo, según un funcionario.
Los funcionarios también señalaron que Biden está decidido a restablecer las comunicaciones militares de las cuales Pekín se retiró en gran medida después de la visita de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a Taiwán en agosto de 2022. Mientras tanto, ha habido un aumento en el número de encuentros riesgosos o provocativos que involucran a los buques y aeronaves de ambas naciones.
El mes pasado, el ejército de Estados Unidos publicó un video de un avión de combate chino volando a menos de tres metros de un bombardero B-52 estadounidense sobre el Mar del Sur de China, casi causando un accidente. A principios de ese mes, el Pentágono difundió imágenes de más de 180 interceptaciones de aviones de guerra estadounidenses por parte de aeronaves chinas que ocurrieron en los últimos dos años, parte de una tendencia que los funcionarios militares estadounidenses consideran preocupante.
El Pentágono ha advertido que la falta de contactos militares “aumenta el riesgo de que un incidente operativo o un cálculo erróneo se convierta en una crisis o conflicto”.
Ambas partes parecen estar considerando cuidadosamente la seguridad para la reunión, ya que han optado por no dar a conocer el lugar de las tan esperadas conversaciones. Se espera que miles de personas que protestan contra la destrucción del clima, las prácticas corporativas, la guerra entre Israel y Hamas y otros problemas se congreguen en San Francisco durante la cumbre.
El jefe del Departamento de Policía de San Francisco, Bill Scott, dijo que su departamento espera varias protestas al día. Aseguró que la ciudad respeta el derecho de las personas a movilizarse pacíficamente, pero no tolerará la destrucción de propiedades, la violencia ni ningún otro delito.
El encuentro, que se celebrará en los márgenes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en la bahía de San Francisco, podría durar horas y en él participarán equipos de funcionarios de Pekín y Washington.
Se espera que se traten temas globales como la guerra entre Israel y Hamas, la invasión rusa de Ucrania, los lazos de Corea del Norte con Rusia, Taiwán, el Indo-Pacífico, los derechos humanos, el fentanilo, la inteligencia artificial, así como el comercio “justo” y las relaciones económicas, expresaron los funcionarios.
“No se ocultará nada; todo está sobre la mesa”, indicó a la prensa un alto funcionario de la administración Biden que no quiso ser citado.
“Tenemos las cosas claras. Sabemos que los esfuerzos por moldear o reformar China a lo largo de varias décadas han fracasado. No obstante, esperamos que China esté presente y sea un actor importante en la escena mundial durante el resto de nuestras vidas”, agregó.
Las autoridades estadounidenses, que llevan casi un año presionando para que se celebre la reunión, creen que Pekín ha estado trabajando de forma activa para socavar la política estadounidense en todo el mundo. Sin embargo, funcionarios de la Casa Blanca han insistido en que desean una “rivalidad” con China, pero no un “conflicto” ni una “Guerra Fría”.
Biden y Xi se reunieron por última vez hace casi un año en los márgenes de la Cumbre del G20 en Bali, Indonesia. En la reunión de casi tres horas, el presidente norteamericano objetó directamente las “acciones coercitivas y cada vez más agresivas” de China hacia Taiwán y discutió la invasión de Ucrania por parte de Rusia, entre otros temas. Por su parte, el mandatario chino enfatizó que “la cuestión de Taiwán está en el núcleo mismo de los intereses fundamentales de China y que es la primera línea roja que no debe cruzarse en las relaciones entre China y Estados Unidos”.
2024, un año clave
La reunión de la próxima semana se produce mientras Washington se prepara para otro año potencialmente complicado en las relaciones con Pekín, ya que Taiwán tiene previsto celebrar elecciones presidenciales en enero y Estados Unidos en noviembre.
Pekín considera que el contacto oficial estadounidense con Taiwán es un estímulo suficiente para hacer permanente la independencia de facto de la isla, algo que los líderes norteamericanos dicen que no respaldan. Aunque Estados Unidos ha mantenido que Taipéi es un socio importante en el Indo-Pacífico, Biden tiene la intención de reafirmar que Estados Unidos no desea un cambio en el statu quo, según un funcionario.
Los funcionarios también señalaron que Biden está decidido a restablecer las comunicaciones militares de las cuales Pekín se retiró en gran medida después de la visita de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a Taiwán en agosto de 2022. Mientras tanto, ha habido un aumento en el número de encuentros riesgosos o provocativos que involucran a los buques y aeronaves de ambas naciones.
El mes pasado, el ejército de Estados Unidos publicó un video de un avión de combate chino volando a menos de tres metros de un bombardero B-52 estadounidense sobre el Mar del Sur de China, casi causando un accidente. A principios de ese mes, el Pentágono difundió imágenes de más de 180 interceptaciones de aviones de guerra estadounidenses por parte de aeronaves chinas que ocurrieron en los últimos dos años, parte de una tendencia que los funcionarios militares estadounidenses consideran preocupante.
El Pentágono ha advertido que la falta de contactos militares “aumenta el riesgo de que un incidente operativo o un cálculo erróneo se convierta en una crisis o conflicto”.
Ambas partes parecen estar considerando cuidadosamente la seguridad para la reunión, ya que han optado por no dar a conocer el lugar de las tan esperadas conversaciones. Se espera que miles de personas que protestan contra la destrucción del clima, las prácticas corporativas, la guerra entre Israel y Hamas y otros problemas se congreguen en San Francisco durante la cumbre.
El jefe del Departamento de Policía de San Francisco, Bill Scott, dijo que su departamento espera varias protestas al día. Aseguró que la ciudad respeta el derecho de las personas a movilizarse pacíficamente, pero no tolerará la destrucción de propiedades, la violencia ni ningún otro delito.
Working collaboratively with city agencies and public safety partners, we’re committed to ensuring everyone’s safety during #APEC2023. Thank you Mayor @LondonBreed and fellow city officials for hosting this morning’s press conference on updates regarding APEC. pic.twitter.com/YKaDNmCG9E
— SFPD Chief Scott (@SFPDChief) November 9, 2023
Con información de
La Nación