Debate educativo
Rodrigo Alonso de Amsafe y los miles de millones de pesos destinados a “empresas educativas”
Miércoles 08 de
Marzo 2023
Por:
Maxi Romero
«La provincia de Santa Fe tiene la educación privada más pública del país», Martín Lucero, Sadop.
Santa Fe destina miles de millones de pesos a "empresas educativas privadas" y la dirigencia de Amsafe durante largos años ha acompañado esa decisión del Estado.
Rodrigo Alonso, reclamando en el Ministerio de Educación, junto a aliados que pelean por
Rodrigo Alonso, quien sucede la política de Sonia Alesso, nunca impugnó ni cuestionó en paritaria que el Estado santafesino, de su presupuesto, destine enormes cantidades de dinero a sostener empresas educativas del ámbito privado.
Mientras las escuelas públicas sufren falta de baños, el calor, el frío, la falta de aulas, robos, etc., el dirigente de los/as maestros/as Alonso hace causa común con voces que afirman lo siguiente: “El año pasado la inversión en salarios por medio de subsidios (que se aumentan en paritarias con la presencia de Sadop por el sector) representaron 30 mil millones de pesos. O sea... casi todo su presupuesto”, (Martín Lucero).
Es decir, los “subsidios” a las empresas que “se aumentan en paritarias” y representan “casi todo un presupuesto” tienen el acompañamiento de la Amsafe de Alonso. Al punto, que esta entidad jamás impugnó que Sadop negocie “subvenciones” en el ámbito paritario que engrosan la gestión privada.
En el mundo del trabajo se da algo inédito: en paritarias un sector reconoce a viva voz que no negocia salarios sino subsidios para sus empleadores.
El sindicalismo que promueve Rodrigo Alonso fomenta la privatización de la educación y su sostenimiento.
Indicado por sus propios aliados: “en realidad técnicamente el impacto del subsidio del estado en los sueldos docentes y en los presupuestos de la escuela (privada) es casi total” narró Lucero que, además, dijo que “la provincia de Santa Fe tiene la educación privada más pública del país”. Si no se lee antes quien los dijo, parece una manifestación de logro más bien de un empresario contento por la proliferación de escuelas privadas.
El titular de la Amsafe, entonces, acompaña que con los impuestos de todos los/as santafesinos/as y parte significativa del presupuesto educativo de la provincia se sostengan (técnicamente hablando) “empresas educativas”. Pero luego, contradictoriamente, se queja en los medios por la falta inversión para la escuela pública. Que faltan cargos. Que hay que mejorar salarios.
Creo que Alonso podría afiliarse a un sindicato que defienda los intereses de las empresas educativas (sostenidas “con la tuya” estimado lector). Y los dirigentes de la gestión privada afiliarse a una entidad gremial que represente docentes públicos (si aspiran a negociar con la patronal estatal).
Hay escuelas privadas con subsidios cada vez más lindas ediliciamente y escuelas públicas cada vez más deterioradas.
Esta dirigencia no reclama a las instituciones privadas que se valgan por sí mismas. Al contrario, casi en representación de ellas, se jacta de que los “subsidios”… “se aumentan en paritarias” y representan “casi todo un presupuesto”. Todo con pretensión que se extienda en el tiempo eternamente.
Alonso y compañía podrían aspirar a que con el monto presupuestario destinado a la gestión privada progresivamente se construyan escuelas de gestión estatal y que se incorporen docentes con la estabilidad del empleo público. Podrían pregonar que las “empresas educativas” no se sostengan gracias al Estado y el esfuerzo de todos. Podrían aspirar, de esa manera, a colaborar con una escuela pública gratuita y de calidad con más inversión.
¿La defensa de la escuela pública?, bien gracias.
Mientras las escuelas públicas sufren falta de baños, el calor, el frío, la falta de aulas, robos, etc., el dirigente de los/as maestros/as Alonso hace causa común con voces que afirman lo siguiente: “El año pasado la inversión en salarios por medio de subsidios (que se aumentan en paritarias con la presencia de Sadop por el sector) representaron 30 mil millones de pesos. O sea... casi todo su presupuesto”, (Martín Lucero).
Es decir, los “subsidios” a las empresas que “se aumentan en paritarias” y representan “casi todo un presupuesto” tienen el acompañamiento de la Amsafe de Alonso. Al punto, que esta entidad jamás impugnó que Sadop negocie “subvenciones” en el ámbito paritario que engrosan la gestión privada.
En el mundo del trabajo se da algo inédito: en paritarias un sector reconoce a viva voz que no negocia salarios sino subsidios para sus empleadores.
El sindicalismo que promueve Rodrigo Alonso fomenta la privatización de la educación y su sostenimiento.
Indicado por sus propios aliados: “en realidad técnicamente el impacto del subsidio del estado en los sueldos docentes y en los presupuestos de la escuela (privada) es casi total” narró Lucero que, además, dijo que “la provincia de Santa Fe tiene la educación privada más pública del país”. Si no se lee antes quien los dijo, parece una manifestación de logro más bien de un empresario contento por la proliferación de escuelas privadas.
El titular de la Amsafe, entonces, acompaña que con los impuestos de todos los/as santafesinos/as y parte significativa del presupuesto educativo de la provincia se sostengan (técnicamente hablando) “empresas educativas”. Pero luego, contradictoriamente, se queja en los medios por la falta inversión para la escuela pública. Que faltan cargos. Que hay que mejorar salarios.
Creo que Alonso podría afiliarse a un sindicato que defienda los intereses de las empresas educativas (sostenidas “con la tuya” estimado lector). Y los dirigentes de la gestión privada afiliarse a una entidad gremial que represente docentes públicos (si aspiran a negociar con la patronal estatal).
Hay escuelas privadas con subsidios cada vez más lindas ediliciamente y escuelas públicas cada vez más deterioradas.
Esta dirigencia no reclama a las instituciones privadas que se valgan por sí mismas. Al contrario, casi en representación de ellas, se jacta de que los “subsidios”… “se aumentan en paritarias” y representan “casi todo un presupuesto”. Todo con pretensión que se extienda en el tiempo eternamente.
Alonso y compañía podrían aspirar a que con el monto presupuestario destinado a la gestión privada progresivamente se construyan escuelas de gestión estatal y que se incorporen docentes con la estabilidad del empleo público. Podrían pregonar que las “empresas educativas” no se sostengan gracias al Estado y el esfuerzo de todos. Podrían aspirar, de esa manera, a colaborar con una escuela pública gratuita y de calidad con más inversión.
¿La defensa de la escuela pública?, bien gracias.
Además hay que estudiar un poco. El año pasado la inversión en salarios por medio de subsidios (que se aumentan en paritarias con la presencia de Sadop por el sector) representaron 30 mil millones de pesos.
O sea... casi todo su presupuesto.
— Tincho Lucero (@tincholucero) February 16, 2023
🗣️Colegios privados y límites en sus cuotas: «La provincia de Santa Fe tiene la educación privada más pública del país». https://t.co/kogCCWjBvY
— RADIOFONICA 100.7 (@radiofonica1007) February 15, 2023