Excursión a la Argentina real, el "voto Rappi" de Milei y lo que la casta ignora
Por:
Jorge Lanata
Sábado 11 de
Febrero 2023
Los alarmantes resultados de un estudio en hogares del segundo cordón del Conurbano. La ascendencia allí del libertario y la abismal separación de los políticos con la gente.
En "Confieso que he vivido",el libro de memorias de Pablo Neruda, el poeta chileno recuerda sus años en el servicio diplomático en el sudeste asiático.
"Paso a paso fui conociendo la isla. Una noche atravesé todos los oscuros suburbios de Colombo para asistir a una comida de gala (…) A mitad de camino, Don Pablo se detiene extasiado por los sonidos de una cantante local. Pierde noción del tiempo y, por supuesto, llega tarde a la comida".
"Los ingleses ya estaban sentados a la mesa, vestidos de negro y blanco -siguen las memorias-. Perdónenme, en el camino me detuve a oír música -les dije. Ellos, que habían vivido veinticinco años en Ceilán, se sorprendieron elegantemente. ¿Música? ¿Tenían música los nativos? Ellos no lo sabían. Era la primera noticia. Esa terrible separación de los colonizadores ingleses con el vasto mundo asiático nunca tuvo término. Y siempre significó un aislamiento anti humano, un desconocimiento total de los valores y la vida de aquella gente".
El recuerdo de Neruda es bastante similar a aquella anécdota -quizá apócrifa- de Maria Antonieta cuando le dijeron que los campesinos no tenían pan y respondió,displicente: "Que coman brioche, entonces".
Ambos hechos, el del Premio Nobel chileno y el de la Reina de Francia y de Navarra, refieren a la Argentina. Esta semana,durante un acto partidario, dijo el ministro del Interior Wado de Pedro: "Apaguemos la discusión interna por un rato y volvamos a poner nuestro corazón al lado de las necesidades de nuestro pueblo".
Wadito propuso “por un rato” hacer el trabajo por el que fueron votados. La separación entre los políticos y la gente es abismal; esa distancia es la que hizo que la idea de “casta” reflejara tan exactamente la situación. En la India, aún hoy, las castas son caminos paralelos que se ignoran y nunca se tocan.
Hace unos días, una de las principales empresas de consumo masivo de la Argentina llevó a sus directivos a visitar familias de clase baja y media baja del segundo cordón del Conurbano con la idea de entender cómo funciona el hogar del grupo social más grande de consumidores en el AMBA: una excursión a la pobreza.
Se buscó que, al menos, un miembro de la familia que iban a visitar tuviera trabajo estable (policía, municipal, empleado penitenciario, empleada doméstica o de la construcción). La Argentina que descubrieron era asi:
- Los alimentos se compran por comida.
- Hay una sola comida “fuerte” en el hogar: la cena. El almuerzo y la merienda consisten en una infusión con galletitas; mate cocido,té o malta. El café es un bien suntuario.
- Los chicos comen dos veces porque almuerzan en la escuela.
- La compra diaria empieza por fideos o arroz y una salsa. Las proteínas se compran con el vuelto. En el Conurbano pobre nadie compra un pollo o un kilo de carne. Se pide en el mostrador $ 328 de pollo o lo que el vuelto determine.
- El queso de rallar esta en extinción. Los clientes piden que se corten a la mitad o en cuartos las piezas de queso que están expuestas por porciones en la góndola. "Compran un dado de queso", describe unos de los participantes del estudio.
- Los alimentos se compran a cinco cuadras a la redonda de donde vive la familia. La encargada de esa tarea es generalmente una mujer que debe volver rápido a su casa porque tiene niños, ancianos o alguna persona con discapacidad a su cargo.
- El costo de trasladarse no se puede amortizar comprando una sola comida: ”No voy a gastar 32 pesos de ida y 32 pesos de vuelta, porque me consumo el 10% de lo que tengo para comprar”.
- En las entrevistas hubo quienes expresaron que no tenían “ropa acorde” para ir al supermercado.
- Comprando en cercanía pagan por la carne un 50% mas de lo que vale en un supermercado, por los productos de almacén un 30% mas y por el aceite un 100% mas.
- En el menú cotidiano rara vez hay frutas o verduras. El yogurt no existe y se compran sal y azúcar de primeras marcas porque las segundas no rinden: “Hay que usar el doble”.
- Cuando se les pregunta qué sueñan comer la respuesta habitual es “una milanesa”. Y el asado? “Ya ni me acuerdo la última vez que comí un asado”, responden.
- La ropa se compra en ferias de usado o en el Market Place de Facebook.
- El segundo ingreso, cuando existe, siempre es en negro. O -si se trata de la changa de un adolescente- en especies. Puede ser en un almacén, por ejemplo, algún alimento con el envase estropeado o retazos de la fiambrería.
- Esta pobreza es tecnológica: lo primero que se paga en la casa es el WiFi; es lo que garantiza el funcionamiento de los celulares que, por supuesto, no tienen plan de datos.
- Los sentimientos que predominan en estos grupos son los de decepción y rabia. El aspiracional de esta población ya no es la casa o el auto, sino poder consumir. "No caerse del sistema", explica Ximena Diaz Alarcón, CEO de la consultora Youniversal.
El político Javier Milei, que dice que no es un político, ya se posiciona como tercera fuerza y tiene un promedio de intención de voto entre el 18 y el 20%.
Milei tiene “el voto Rappi”, en alusión a los jóvenes de clase baja, votantes tradicionales del peronismo hoy desencantados con un trabajo de baja calidad pero que se perciben como "independientes".
Los pibes Rappi resisten la sindicalización que los presiona desde la izquierda y se organizan entre ellos para protegerse o, por ejemplo, para recuperar una moto robada sin contactar a la policía. En las cajas del delivery tienen el sticker de Milei.
Cerca de Axel Kiciloff esta convencidos de que los votos del libertario favorecen la reelección del gobernador. "Divide el voto opositor", dicen. En la provincia de Buenos Aires no hay segunda vuelta: se gana por un voto.
Esto es solo una parte de lo que la casta ignora.
"Paso a paso fui conociendo la isla. Una noche atravesé todos los oscuros suburbios de Colombo para asistir a una comida de gala (…) A mitad de camino, Don Pablo se detiene extasiado por los sonidos de una cantante local. Pierde noción del tiempo y, por supuesto, llega tarde a la comida".
"Los ingleses ya estaban sentados a la mesa, vestidos de negro y blanco -siguen las memorias-. Perdónenme, en el camino me detuve a oír música -les dije. Ellos, que habían vivido veinticinco años en Ceilán, se sorprendieron elegantemente. ¿Música? ¿Tenían música los nativos? Ellos no lo sabían. Era la primera noticia. Esa terrible separación de los colonizadores ingleses con el vasto mundo asiático nunca tuvo término. Y siempre significó un aislamiento anti humano, un desconocimiento total de los valores y la vida de aquella gente".
El recuerdo de Neruda es bastante similar a aquella anécdota -quizá apócrifa- de Maria Antonieta cuando le dijeron que los campesinos no tenían pan y respondió,displicente: "Que coman brioche, entonces".
Ambos hechos, el del Premio Nobel chileno y el de la Reina de Francia y de Navarra, refieren a la Argentina. Esta semana,durante un acto partidario, dijo el ministro del Interior Wado de Pedro: "Apaguemos la discusión interna por un rato y volvamos a poner nuestro corazón al lado de las necesidades de nuestro pueblo".
Wadito propuso “por un rato” hacer el trabajo por el que fueron votados. La separación entre los políticos y la gente es abismal; esa distancia es la que hizo que la idea de “casta” reflejara tan exactamente la situación. En la India, aún hoy, las castas son caminos paralelos que se ignoran y nunca se tocan.
Hace unos días, una de las principales empresas de consumo masivo de la Argentina llevó a sus directivos a visitar familias de clase baja y media baja del segundo cordón del Conurbano con la idea de entender cómo funciona el hogar del grupo social más grande de consumidores en el AMBA: una excursión a la pobreza.
Se buscó que, al menos, un miembro de la familia que iban a visitar tuviera trabajo estable (policía, municipal, empleado penitenciario, empleada doméstica o de la construcción). La Argentina que descubrieron era asi:
- Los alimentos se compran por comida.
- Hay una sola comida “fuerte” en el hogar: la cena. El almuerzo y la merienda consisten en una infusión con galletitas; mate cocido,té o malta. El café es un bien suntuario.
- Los chicos comen dos veces porque almuerzan en la escuela.
- La compra diaria empieza por fideos o arroz y una salsa. Las proteínas se compran con el vuelto. En el Conurbano pobre nadie compra un pollo o un kilo de carne. Se pide en el mostrador $ 328 de pollo o lo que el vuelto determine.
- El queso de rallar esta en extinción. Los clientes piden que se corten a la mitad o en cuartos las piezas de queso que están expuestas por porciones en la góndola. "Compran un dado de queso", describe unos de los participantes del estudio.
- Los alimentos se compran a cinco cuadras a la redonda de donde vive la familia. La encargada de esa tarea es generalmente una mujer que debe volver rápido a su casa porque tiene niños, ancianos o alguna persona con discapacidad a su cargo.
- El costo de trasladarse no se puede amortizar comprando una sola comida: ”No voy a gastar 32 pesos de ida y 32 pesos de vuelta, porque me consumo el 10% de lo que tengo para comprar”.
- En las entrevistas hubo quienes expresaron que no tenían “ropa acorde” para ir al supermercado.
- Comprando en cercanía pagan por la carne un 50% mas de lo que vale en un supermercado, por los productos de almacén un 30% mas y por el aceite un 100% mas.
- En el menú cotidiano rara vez hay frutas o verduras. El yogurt no existe y se compran sal y azúcar de primeras marcas porque las segundas no rinden: “Hay que usar el doble”.
- Cuando se les pregunta qué sueñan comer la respuesta habitual es “una milanesa”. Y el asado? “Ya ni me acuerdo la última vez que comí un asado”, responden.
- La ropa se compra en ferias de usado o en el Market Place de Facebook.
- El segundo ingreso, cuando existe, siempre es en negro. O -si se trata de la changa de un adolescente- en especies. Puede ser en un almacén, por ejemplo, algún alimento con el envase estropeado o retazos de la fiambrería.
- Esta pobreza es tecnológica: lo primero que se paga en la casa es el WiFi; es lo que garantiza el funcionamiento de los celulares que, por supuesto, no tienen plan de datos.
- Los sentimientos que predominan en estos grupos son los de decepción y rabia. El aspiracional de esta población ya no es la casa o el auto, sino poder consumir. "No caerse del sistema", explica Ximena Diaz Alarcón, CEO de la consultora Youniversal.
El político Javier Milei, que dice que no es un político, ya se posiciona como tercera fuerza y tiene un promedio de intención de voto entre el 18 y el 20%.
Milei tiene “el voto Rappi”, en alusión a los jóvenes de clase baja, votantes tradicionales del peronismo hoy desencantados con un trabajo de baja calidad pero que se perciben como "independientes".
Los pibes Rappi resisten la sindicalización que los presiona desde la izquierda y se organizan entre ellos para protegerse o, por ejemplo, para recuperar una moto robada sin contactar a la policía. En las cajas del delivery tienen el sticker de Milei.
Cerca de Axel Kiciloff esta convencidos de que los votos del libertario favorecen la reelección del gobernador. "Divide el voto opositor", dicen. En la provincia de Buenos Aires no hay segunda vuelta: se gana por un voto.
Esto es solo una parte de lo que la casta ignora.