OPINIÓN
HAN DESVIRTUADO AL PERONISMO
Martes 16 de
Agosto 2022
Por:
Maxi Romero
Peronómetro en mano. No. Es la simpleza de controvertir políticas que afectan el corazón y espíritu del movimiento político más grande de la Argentina contemporánea.
Cambio de época. Eso que de repente parece haber atropellado a importantes sectores de la dirigencia política peronista. No han podido “cabalgar los tiempos”.
Cambiar la propia esencia. Algunos dirigentes, además, aspiran a que se defiendan políticas impropias del peronismo. El que NO se concibió como una fábrica de pobreza. Perón no hubiera puesto la informalidad de determinados sectores sociales por encima de la formalidad y el movimiento sindical. Gestionó normativas para fortalecer a los/as trabajadores/as y sus derechos.
La Jefa espiritual del movimiento dijo: “donde hay una necesidad nace un derecho”. Y el Líder: “gobernar es crear trabajo”. Para el Peronismo, en definitiva, existe una sola clase de personas: las que trabajan.
El salario se defiende, no se deteriora. El peronismo puso el asalariado en el primer lugar de las consideraciones políticas. Hoy el salario justo es un compromiso olvidado para las políticas económicas.
Perón le dijo a UDA en su carácter de primer afiliado cuando recibió a su comisión directiva, la frase célebre: "Quien olvida a los maestros está un poco olvidando el futuro del País". ¿Cuánto docentes están por debajo de la línea de pobreza?. La política se ha olvidado de la educación.
Sino fuera por los sindicatos, el mundo laboral sería un caos para las familias.
Lo más impresionante, es como algunos “peronistas” se ciñen a su ficha de afiliación y defienden lo indefendible. Casi como un deber ser obtuso o casi mostrenco. Como dijo Epicteto, "es imposible que un hombre aprenda lo que cree que ya sabe". Evidentemente alguien comprendió mal lo que significa ser peronista.
Cambiar la propia esencia. Algunos dirigentes, además, aspiran a que se defiendan políticas impropias del peronismo. El que NO se concibió como una fábrica de pobreza. Perón no hubiera puesto la informalidad de determinados sectores sociales por encima de la formalidad y el movimiento sindical. Gestionó normativas para fortalecer a los/as trabajadores/as y sus derechos.
La Jefa espiritual del movimiento dijo: “donde hay una necesidad nace un derecho”. Y el Líder: “gobernar es crear trabajo”. Para el Peronismo, en definitiva, existe una sola clase de personas: las que trabajan.
El salario se defiende, no se deteriora. El peronismo puso el asalariado en el primer lugar de las consideraciones políticas. Hoy el salario justo es un compromiso olvidado para las políticas económicas.
Perón le dijo a UDA en su carácter de primer afiliado cuando recibió a su comisión directiva, la frase célebre: "Quien olvida a los maestros está un poco olvidando el futuro del País". ¿Cuánto docentes están por debajo de la línea de pobreza?. La política se ha olvidado de la educación.
Sino fuera por los sindicatos, el mundo laboral sería un caos para las familias.
Lo más impresionante, es como algunos “peronistas” se ciñen a su ficha de afiliación y defienden lo indefendible. Casi como un deber ser obtuso o casi mostrenco. Como dijo Epicteto, "es imposible que un hombre aprenda lo que cree que ya sabe". Evidentemente alguien comprendió mal lo que significa ser peronista.