"El peso ya vale más por su metal que como medio de pago", la devaluación argentina en los medios de España
Martes 17 de
Mayo 2022
El diario español El País, a partir de su suplemento económico Cinco Días, dedicó un artículo sobre el peso argentino.
Según el artículo, la inflación y la continua devaluación de la moneda provocó que valga más fundir los metales. En un fenómeno curioso tras la invasión de Rusia a Ucrania y con el aumento de los precios, muchos argentinos decidieron vender monedas a través de las plataformas.
El conflicto militar ha provocado una alta volatilidad en el valor de materias primas como el níquel, un metal presente en las monedas argentinas de acuñación antigua (la nueva familia de monedas que se lanzó en 2018 está hecha sobre todo de acero). El níquel, un elemento clave en la producción de baterías para los coches eléctricos, disparó tanto su valor tras el inicio de la guerra, que la Bolsa de Metales de Londres suspendió momentáneamente su cotización después de que el 7 de marzo alcanzase su máximo precio histórico, cuando marcó los 42.995 dólares por tonelada. Desde entonces, su precio ha ido cayendo hasta estar por debajo de los u$s28.000.
Otro metal presente en las monedas argentinas y que se busca para su fundición es el cobre. Este material también experimentó un fuerte incremento de su precio el pasado 7 de marzo, para luego volver a bajar. Sin embargo, a diferencia del níquel, el cobre vale menos a día de hoy (apenas supera los 9.000 dólares por tonelada) que a comienzos de año, cuando rondaba los 9.700 dólares.
"Si se bucea en redes sociales como Facebook o webs de comercio electrónico como Mercado Libre (muy utilizada en Argentina), se pueden encontrar publicaciones en las que se anuncia la compra de pesos por encima del valor nominal de dichas monedas. De esta forma, hay anuncios que, por ejemplo, ofrecen pagar tres pesos por una moneda de un peso, o cuatro pesos a cambio de una moneda de dos. Otros, por ejemplo, ofrecen comprar cantidades de monedas por kilo", expresan desde Cinco Días.
“El material del dinero circulante en un país termina valiendo más que el valor nominal de ese circulante en economías que pasan por un periodo prolongado de alta inflación, como el caso de Argentina. Especialmente en el caso de las monedas, el valor del metal aumenta según su precio internacional mientras que el valor nominal de esas monedas no cambia. El proceso de incremento de precio internacional de las materias primas que observamos recientemente también acelera ese proceso de desaparición del circulante en monedas”, explicó Juan Ruiz, de BBVA Research consultado en el artículo.
La explicación está en la inflación
"Argentina finalizó el año pasado con una inflación del 51,4%, según los datos ofrecidos por el Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censos), un alza de precios que ha continuado acentuándose durante este año hasta cerrar abril con una inflación interanual del 59%. “Ha habido antecedentes de este fenómeno en todas las economías que han pasado procesos de alta inflación. En Latinoamérica, hoy tenemos el caso de Venezuela, donde es escaso el dinero circulante en bolívares. Y ha ocurrido en el pasado en la región durante los procesos hiperinflacionarios de finales de los años ochenta en países como Perú, Bolivia, Argentina o Brasil. Pero actualmente este no es un fenómeno generalizado”, afirmó Ruiz.
Por último, para destacar lo llamativo del artículo es que cambiar pesos argentinos en Madrid ya no es posible: "Una persona que desee cambiar pesos argentinos en alguna de las muchas casas de cambio que hay repartidas por el centro de Madrid se encontrará con que ninguna o al menos casi ninguna de ellas acepta pesos. El motivo, explican desde la casa de cambio Ria a este periódico, “es que el stock de pesos está completo”. “La gente se deshace de los pesos pero nadie viene a comprarlos. Cuando el stock está completo ya no se nos permite adquirir pesos hasta que los vendamos”, indican. Otras casas de cambio como Novacambios y Exact Change argumentan que los principales motivos para no aceptar esta moneda son “la gran inestabilidad del peso argentino” y “su gran devaluación”.
El conflicto militar ha provocado una alta volatilidad en el valor de materias primas como el níquel, un metal presente en las monedas argentinas de acuñación antigua (la nueva familia de monedas que se lanzó en 2018 está hecha sobre todo de acero). El níquel, un elemento clave en la producción de baterías para los coches eléctricos, disparó tanto su valor tras el inicio de la guerra, que la Bolsa de Metales de Londres suspendió momentáneamente su cotización después de que el 7 de marzo alcanzase su máximo precio histórico, cuando marcó los 42.995 dólares por tonelada. Desde entonces, su precio ha ido cayendo hasta estar por debajo de los u$s28.000.
Otro metal presente en las monedas argentinas y que se busca para su fundición es el cobre. Este material también experimentó un fuerte incremento de su precio el pasado 7 de marzo, para luego volver a bajar. Sin embargo, a diferencia del níquel, el cobre vale menos a día de hoy (apenas supera los 9.000 dólares por tonelada) que a comienzos de año, cuando rondaba los 9.700 dólares.
"Si se bucea en redes sociales como Facebook o webs de comercio electrónico como Mercado Libre (muy utilizada en Argentina), se pueden encontrar publicaciones en las que se anuncia la compra de pesos por encima del valor nominal de dichas monedas. De esta forma, hay anuncios que, por ejemplo, ofrecen pagar tres pesos por una moneda de un peso, o cuatro pesos a cambio de una moneda de dos. Otros, por ejemplo, ofrecen comprar cantidades de monedas por kilo", expresan desde Cinco Días.
“El material del dinero circulante en un país termina valiendo más que el valor nominal de ese circulante en economías que pasan por un periodo prolongado de alta inflación, como el caso de Argentina. Especialmente en el caso de las monedas, el valor del metal aumenta según su precio internacional mientras que el valor nominal de esas monedas no cambia. El proceso de incremento de precio internacional de las materias primas que observamos recientemente también acelera ese proceso de desaparición del circulante en monedas”, explicó Juan Ruiz, de BBVA Research consultado en el artículo.
La explicación está en la inflación
"Argentina finalizó el año pasado con una inflación del 51,4%, según los datos ofrecidos por el Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censos), un alza de precios que ha continuado acentuándose durante este año hasta cerrar abril con una inflación interanual del 59%. “Ha habido antecedentes de este fenómeno en todas las economías que han pasado procesos de alta inflación. En Latinoamérica, hoy tenemos el caso de Venezuela, donde es escaso el dinero circulante en bolívares. Y ha ocurrido en el pasado en la región durante los procesos hiperinflacionarios de finales de los años ochenta en países como Perú, Bolivia, Argentina o Brasil. Pero actualmente este no es un fenómeno generalizado”, afirmó Ruiz.
Por último, para destacar lo llamativo del artículo es que cambiar pesos argentinos en Madrid ya no es posible: "Una persona que desee cambiar pesos argentinos en alguna de las muchas casas de cambio que hay repartidas por el centro de Madrid se encontrará con que ninguna o al menos casi ninguna de ellas acepta pesos. El motivo, explican desde la casa de cambio Ria a este periódico, “es que el stock de pesos está completo”. “La gente se deshace de los pesos pero nadie viene a comprarlos. Cuando el stock está completo ya no se nos permite adquirir pesos hasta que los vendamos”, indican. Otras casas de cambio como Novacambios y Exact Change argumentan que los principales motivos para no aceptar esta moneda son “la gran inestabilidad del peso argentino” y “su gran devaluación”.
Con información de
Ámbito