Julieta Prandi se peleó con una vecina que odiaba a su perro: "Quería que le ponga un collar que da descargas cuando ladra"
Lunes 31 de
Enero 2022
La novia de Emanuel Ortega contó en Es por ahí Verano el desagradable episodio.
En Es por ahí Verano contaban los conflictos de vecinos que quedan registrados en los grupos de vecinos de WhatsApp. Así Julieta Prandi recordó el mal momento que vivió con una vecina porque le molestaba los ladridos del perro de la modelo.
“Yo no estaba en el chat de los vecinos, pero tuve peleas con una vecina”, recordó. “Tenía una vecina a la que le molestaba que mi perro ladraba mucho. No es el que tengo ahora, es otro”, contó en el ciclo que anima junto al
“Popeye ladraba mucho y cada dos por tres venía a tocarme el timbre para que yo lo calle. Un día, muy amablemente, me sugirió que le compre el collar que les da pataditas”, aseguró, lo que hizo que Julieta se indigne y todos la entiendan.
La bronca de Julieta Prandi por el polémico pedido de la vecina sobre su perro
“Era alemana y me decía ‘le comprás el collar, querida, y cada vez que ladra le da una descarga y se va a callar’”, rememoró, imitando el acento de la mujer.
Muy molesta, la animadora no anduvo con vueltas. “Terminó muy mal la situación. La eché, le dije que se vaya y que le dije que si quería silencio que se fuera a vivir a un country”, expresó.
“Es un edificio. Yo me tengo que fumar las discusiones de todo el mundo. Ya no vivo en ese edificio, pero hay gente desubicada”, concluyó.
“Yo no estaba en el chat de los vecinos, pero tuve peleas con una vecina”, recordó. “Tenía una vecina a la que le molestaba que mi perro ladraba mucho. No es el que tengo ahora, es otro”, contó en el ciclo que anima junto al
“Popeye ladraba mucho y cada dos por tres venía a tocarme el timbre para que yo lo calle. Un día, muy amablemente, me sugirió que le compre el collar que les da pataditas”, aseguró, lo que hizo que Julieta se indigne y todos la entiendan.
La bronca de Julieta Prandi por el polémico pedido de la vecina sobre su perro
“Era alemana y me decía ‘le comprás el collar, querida, y cada vez que ladra le da una descarga y se va a callar’”, rememoró, imitando el acento de la mujer.
Muy molesta, la animadora no anduvo con vueltas. “Terminó muy mal la situación. La eché, le dije que se vaya y que le dije que si quería silencio que se fuera a vivir a un country”, expresó.
“Es un edificio. Yo me tengo que fumar las discusiones de todo el mundo. Ya no vivo en ese edificio, pero hay gente desubicada”, concluyó.
Con información de
Ciudad Magazine