El CONICET desarrollará tanques para un vehículo espacial
Viernes 27 de
Agosto 2021
“La concreción de este proyecto es un hito para el grupo y es el resultado de muchos años de trabajo.
La verdad que estamos muy contentos”, explicó Exequiel Rodríguez, quien dirige el grupo de investigación en materiales compuestos de uso aeroespacial del Instituto de Investigaciones en Ciencia y Tecnología de Materiales (INTEMA), de CONICET y la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP).
Desde hace 10 años, Rodríguez y su equipo trabajan para la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y la empresa Veng SA en el desarrollo de componentes y materiales compuestos para la construcción del lanzador de satélites que lleva adelante la agencia espacial nacional.
En esta oportunidad, el grupo del INTEMA resultó seleccionado para el desarrollo de componentes específicos para el lanzador Tronador, en el marco del programa “Investigaciones orientadas para satélites” de la Agencia de I+D+i.
Durante su participación en el programa “Desde el Conocimiento” que se emite por C5N Rodríguez explicó que el financiamiento que aportará la agencia “nos permitirá cambiar la escala y obtener productos que puedan emplearse directamente en los cohetes fabricados en el país”.
“De esta forma, la Facultad de Ingeniería y el INTEMA se constituyen como proveedores directos del plan espacial nacional”, resaltó.
Junto a su equipo, desarrollarán recipientes de presión, un elemento clave en los lanzadores espaciales, ya que permiten almacenar el combustible y los gases presurizantes y propelentes que se emplean durante el despegue.
El equipo de trabajo está conformado por los investigadores Juan Morán, Lucía Asaro, Pablo Montemartini, Pablo Leiva, Liliana Manfredi y Analía Tomba, todos pertenecientes al INTEMA y a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Los primeros prototipos de los recipientes que obtuvieron los investigadores marplatenses fueron desarrollados empleando materiales de muy bajo peso basados en fibras de carbono y nanocompuestos poliméricos y el diseño mecánico se obtuvo empleando métodos basados en algoritmos genéticos, es decir, un tipo particular de inteligencia artificial.
Este proyecto de tres años de duración permitirá escalar el proceso de fabricación, realizar pruebas de confiabilidad y obtener componentes certificados que puedan emplearse en las pruebas de lanzamiento.
“Desarrollamos materiales más livianos y resistente, para que el cohete tenga menos peso y pueda transportar más carga útil. Hace unos años nos dieron el desafío de realizar tanques, pero que sean muy livianos. Logramos producir un prototipo basado en fibras de carbono que es muy liviano y fuimos adjudicados con este proyecto”, destacó el investigador.
Desde hace 10 años, Rodríguez y su equipo trabajan para la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y la empresa Veng SA en el desarrollo de componentes y materiales compuestos para la construcción del lanzador de satélites que lleva adelante la agencia espacial nacional.
En esta oportunidad, el grupo del INTEMA resultó seleccionado para el desarrollo de componentes específicos para el lanzador Tronador, en el marco del programa “Investigaciones orientadas para satélites” de la Agencia de I+D+i.
Durante su participación en el programa “Desde el Conocimiento” que se emite por C5N Rodríguez explicó que el financiamiento que aportará la agencia “nos permitirá cambiar la escala y obtener productos que puedan emplearse directamente en los cohetes fabricados en el país”.
“De esta forma, la Facultad de Ingeniería y el INTEMA se constituyen como proveedores directos del plan espacial nacional”, resaltó.
Junto a su equipo, desarrollarán recipientes de presión, un elemento clave en los lanzadores espaciales, ya que permiten almacenar el combustible y los gases presurizantes y propelentes que se emplean durante el despegue.
El equipo de trabajo está conformado por los investigadores Juan Morán, Lucía Asaro, Pablo Montemartini, Pablo Leiva, Liliana Manfredi y Analía Tomba, todos pertenecientes al INTEMA y a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Los primeros prototipos de los recipientes que obtuvieron los investigadores marplatenses fueron desarrollados empleando materiales de muy bajo peso basados en fibras de carbono y nanocompuestos poliméricos y el diseño mecánico se obtuvo empleando métodos basados en algoritmos genéticos, es decir, un tipo particular de inteligencia artificial.
Este proyecto de tres años de duración permitirá escalar el proceso de fabricación, realizar pruebas de confiabilidad y obtener componentes certificados que puedan emplearse en las pruebas de lanzamiento.
“Desarrollamos materiales más livianos y resistente, para que el cohete tenga menos peso y pueda transportar más carga útil. Hace unos años nos dieron el desafío de realizar tanques, pero que sean muy livianos. Logramos producir un prototipo basado en fibras de carbono que es muy liviano y fuimos adjudicados con este proyecto”, destacó el investigador.
Con información de
Ámbito